Al conocerse la designación como Papa del cardenal Robert Prevost, el Episcopado ecuatoriano expresó su confianza en que "seguirá siendo un incansable peregrino de esperanza".
El nuevo pontífice hizo una visita no anunciada al santuario agustino de la Madonna del Buon Consiglio, en Genazzano, en la periferia de la capital italiana.
Emocionado, con lágrimas en los ojos, León XIV pronunció un largo discurso desde el balcón de la basílica vaticana, en el que llamó a la paz y a una Iglesia abierta a todos.