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Una larga espera para un descanse en paz

miércoles, 22 julio 2020 - 04:06
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* Este testimonio forma parte del especial de Vistazo.com dedicado a quienes fallecieron a causa de la pandemia y cuyos cuerpos desaparecieron por una cadena de negligencias durante los meses más críticos de la emergencia sanitaria en Guayaquil. Fueron más de 200 los cuerpos que tras su último aliento, no pudieron descansar en paz.
 
Parecería que falta poco para encontrar el cadáver de su padre. Hace dos semanas Eduardo Barrezueta colaboró con su muestra para la prueba de ADN, pero no tiene fecha para saber los resultados. Él busca a su padre Yin Barrezueta, de 57 años.
 
La prueba de ADN se realiza luego de que un cadáver no ha sido reconocido a través de sus huellas dactilares o de informes antropológicos.
 
Yin Barrezueta falleció en su casa el 31 de marzo, cuando el sistema de salud estuvo colapsado en Guayaquil a causa de la pandemia del covid-19.
 
"No lo quisieron atender porque todo estaba colapsado. Luego de cuatro días fueron a retirar el cadáver de la casa", cuenta Eduardo.
 
En esa ocasión le dijeron que el cuerpo de su papá lo habían llevado a los contendedores que estaban en el Hospital del Guasmo.
 
No pudo hacer seguimiento del cuerpo de su padre ni los trámites porque Eduardo y su esposa se enfermaron supuestamente de covid. Tuvieron que guardar cuarentena en casa.
 
 
Tampoco consiguió ayuda de sus conocidos para serguir la pista del cadáver.
 
"Como en ese tiempo entregaba cualquier cuerpo, no sé si lo habrán entregado equivocadamente. No sabemos nada", afirma su hijo, refiriéndose a los días en que hubo caos y nula información.
 
Yin era maestro pintor. Además tenía un bar cerca de su domicilio, ubicado en la Isla Trinitaria, al sur de Guayaquil.
 
Su hijo también se dedica a ese oficio. "Yo sufría de asma y ahora cuando trabajo me hace falta el aire. Pero no me queda más que trabajar para alimentar a mis hijos, a mi esposa y a mi mamá", señala Eduardo.

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