Fuera de peligro, Lucas reveló que, para mantenerse con el vida en ese gélido y empinado paraje, durmió dentro de cuevas, sobre hojas, y unió fuerzas con un inesperado compañero.
El hecho ocurre aproximadamente tres semanas después de que cinco personas fallecieron y otras veintidós resultaron heridas en un accidente similar, en Bolívar.