La Ley de Fortalecimiento Crediticio intenta reducir los gastos del BIESS y darle más herramientas para obtener mayores recursos. No hay una privatización de por medio, subrayan los especialistas consultados.
Cuando un afiliado fallece, es posible que sus familiares soliciten sus fondos de reserva y cesantía, siempre que cumplan con los requisitos que estipula el IESS.