16 militares y cinco civiles fueron detenidos este miércoles luego de una serie de allanamientos por parte de la Fiscalía General del Estado y la Policía Nacional en unidades militares y domicilios particulares ubicadas en varias provincias, según informó el Ejército ecuatoriano.
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La institución detalló que la investigación aborda una presunta trama de venta de información reservada y que esta se venía desarrollando desde meses, luego de que operaciones de inteligencia revelaron filtraciones con respecto a intervenciones militares en curso que se ejecutaban en una zona fronteriza.
"El Ejército Ecuatoriano, en su momento, entregó las pruebas como un acto urgente, donde se puso en conocimiento a la Fiscalía de la provincia de Loja, sobre la presunta venta y fuga de información desde una unidad militar de la jurisdicción", agregó el componente de las Fuerzas Armadas en su comunicado, difundido en redes sociales.
"Hubo 16 miembros de los militares que eran los facilitadores en la organización para establecer las rutas que se ocupaban para transportar material ilícito, o el combustible, o el contrabando", declaró el ministro del Interior, John Reimberg, revelando que los uniformados implicados estarían vinculados a rutas de contrabando entre Ecuador y Perú, sin ahondar en detalles.
En mayo de este año, el Ejército dio a conocer que investigaba una posible filtración por parte de militares a una disidencia de la exguerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), denominada Comandos de la Frontera, que operan en el norte de Ecuador.
Las Fuerzas Armadas atribuyen a este grupo el asesinato a través de una emboscada de 11 soldados, perpetrado el pasado 9 de agosto. El hecho ocurrió en el marco de una operación militar contra la minería ilegal realizada en la zona de Alto Punino, en la provincia de Orellana.
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Una de las hipótesis que sostuvo la institución en ese entonces apuntaba a que integrantes de los llamados Comandos de la Frontera, en colaboración con el grupo criminal ecuatoriano Los Lobos, podrían haber adquirido la información por parte de militares para estar al tanto de las operaciones previstas en el área.