Francesca Manno, de 83 años, murió aplastada cuando cruzaba el patio de su edificio mientras un vecino de 70 años caía desde 20 metros de altura tras intentar quitarse la vida.
Las redes criminales lideradas por albaneses se infiltraron en los puertos, el poder judicial, el sistema penitenciario y las fuerzas de seguridad del Ecuador para hacerse con el control de eslabones clave de la cadena de suministro de cocaína.