El nuevo Papa León XIV es considerado por especialistas como “el menos estadounidense de los estadounidenses” por la moderación de sus palabras. Además, es aficionado al tenis, tiene una conexión especial con Perú y forma parte de la orden religiosa de San Agustín.
Robert Francis Prevost, de nacionalidad estadounidense y peruana, fue seleccionado como pontífice 267 de la historia, tras ser elegido por los 133 cardenales reunidos en el segundo día de cónclave.
En su primer discurso, el nuevo pontífice llamó a la paz y a formar una Iglesia abierta a todos, sobre todo a los que sufren. También, agradeció al Papa Francisco, con quien era muy cercano.
Con la elección de León XIV también llega una nueva era para el Vaticano y la Iglesia Católica, en la que el pontífice deberá seguir el camino de su predecesor o imponer un nuevo estilo.
Por el momento, ya se conocen ciertos datos sobre su vida que muestran sus aficiones e ideales, los cuales podrían estar presentes en su pontificado. Aquí te contamos cinco datos que quizás no conocías sobre el nuevo pontífice.
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Su lema episcopal es “In Illo uno unum”, palabras que San Agustín pronunció en un sermón, la Exposición sobre el Salmo 127, para explicar que “aunque los cristianos somos muchos, en el único Cristo somos uno”.
Y es que León XIV procede de la orden episcopal de los agustinos. Nació el 14 de septiembre de 1955 en Chicago y asistió a un seminario menor de la Orden de San Agustín en San Luis como novicio antes de graduarse en Matemáticas en Filadelfia.
También es Políglota y estudió Derecho Canónico en Roma, donde también obtuvo un doctorado.
Se unió a los agustinos en Perú en 1985 para la primera de sus misiones en el país andino.
Al regresar a Chicago en 1999, fue nombrado prior provincial de los agustinos en esa región estadounidense y posteriormente prior general de la orden en todo el mundo.
El Papa León XIV es un aficionado confeso al tenis y echa de menos usar la raqueta.
“Me considero un tenista aficionado. Desde que salí de Perú he tenido pocas ocasiones de practicarlo, así que tengo muchas ganas de volver a la pista. Mi nuevo trabajo (cardenal) no me ha dejado mucho tiempo libre para ello hasta ahora”, dijo en una entrevista con la Orden Agustiniana.
Ahora, a sus 69 años y con el nuevo cargo, se antoja poco posible que vuelva a las pistas de manera regular, al menos.
Fue misionero de 1985 a 1999, antes de ocupar el cargo de obispo de Chiclayo (Perú) de 2013 a 2023, cuando Francisco lo nombró cardenal. De hecho, tiene la ciudadanía peruana.
León XIV es considerado como un hombre comprometido con los Derechos Humanos y la conservación del medioambiente.
Prevost vivió en la remota localidad peruana de Chulucanas, “una diócesis conflictiva, con minería ilegal”, donde puso en marcha su trabajo en pro de los derechos de las personas y la naturaleza.
En Perú lo recuerdan como una persona afín a los principios que marcó Francisco.
Agrega: “Es muy conciliador, pero (con) las cosas también muy claras”.
“Francisco era italiano nacido en Argentina y dominaba los dos mundos. Aquí podemos hablar hasta de tres mundos: nació en Estados Unidos, estudió en Roma y pasó 40 años de misionero en el Perú. Conoce las periferias”, subrayó Guadalupe.
Prevost ha pasado un tercio de su vida en Estados Unidos. El resto entre Europa y América Latina.
El diario italiano La Repubblica lo llamó “el menos estadounidense de los estadounidenses” por la moderación de sus palabras.
La idea de un Papa norteamericano estuvo por siglos descartada en Roma, ya fuera por la distancia, estaban tan lejos que normalmente llegaban tarde a los cónclaves, o por decisiones geopolíticas.
Según el sitio especializado Crux, tener un pontífice de la primera potencia mundial hacía temer además que la CIA pudiera meter sus manos en la Iglesia.