Con 77 votos a favor, la Asamblea Nacional aprobó la Ley Orgánica de Inteligencia, una norma que causó polémica los últimos días, ya que incluye pedidos de información e interceptación de llamadas sin orden judicial.
La tarde de este martes 10 de junio, el Pleno de la Legislatura debatió el texto final de la normativa luego de que la semana pasada iniciara el segundo debate, en el que se hicieron algunas observaciones a la propuesta de ley.
Durante la reunión de hoy hubo posturas divididas. Por un lado, la bancada oficialista de Acción Democrática Nacional (ADN) defendió que por primera vez el país contará con una ley que integre todos los sistemas de inteligencia para combatir al crimen.
“Un sistema de inteligencia es clave para mapear y rastrear al crimen organizado y dar una herramienta adicional al Estado para combatir al crimen transnacional y el narcotráfico”, dijo Inés Alarcón, asambleísta de ADN y ponente del proyecto.
Mientras tanto, la bancada de la Revolución Ciudadana y ciertos legisladores de Pachakutik y Partido Social Cristiano (PSC) se mostraron preocupados, ya que manifestaron que el documento permite el acceso a datos personales sin orden judicial.
De hecho, el correísmo emitió un comunicado en el que proponía ejecutar la votación por bloques, excluyendo algunos artículos polémicos que “implican espionaje, vulneración de datos personales, filtración legalizada, politización de la UAFE y que exponga a las y los ciudadanos”.
Sin embargo, esto no fue posible y, al final, la mayoría oficialista logró un nuevo triunfo alcanzando 77 votos a favor para aprobar la norma íntegra.
Llamó la atención que David Arias, legislador de Galápagos de la RC, también votó a favor, lo que desembocó en su expulsión.
También hubo 66 votos en contra y 7 abstenciones, principalmente de la Revolución Ciudadana, algunos asambleístas de Pachakutik y PSC.