La danza tomó protagonismo en el Malecón 2000, uno de los puntos más icónicos de la ciudad de Guayaquil, con una puesta en escena sin precedentes en el país, llevada a cabo este jueves.
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Cien bailarinas provenientes de doce academias locales se reunieron en el muelle de la Armada Nacional para formar la barra de ballet más grande realizada hasta ahora en Ecuador.
El espectáculo, impulsado por la Fundación Malecón 2000 y coordinado por la gestora cultural y maestra de danza Yesenea Mendoza, llenó de elegancia el tradicional paseo ribereño, donde el público pudo disfrutar de una clase magistral de ballet al aire libre.
Durante cerca de una hora, los bailarines ejecutaron movimientos técnicos como plié, relevé, pirouette y port de bras, adaptando la estructura tradicional de una clase de barra a un entorno abierto.
Todos los participantes vistieron el clásico uniforme de práctica: leotardos y faldas negras con medias rosadas, en una imagen que evocó la disciplina y belleza del ballet universal.
La jornada cerró con un homenaje sonoro a la identidad ecuatoriana: una versión adaptada de Nuestro Juramento, de Julio Jaramillo, que dio un toque emotivo a la experiencia artística junto al río Guayas.
La iniciativa busca sembrar una tradición en Guayaquil, al estilo de otras ciudades europeas donde este tipo de actividades son comunes y llegan a reunir a cientos de bailarines. La visión a largo plazo es posicionar a la ciudad como un referente en el desarrollo de las artes escénicas del país.
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El evento también marcó el cierre del Mes de las Artes, en sintonía con el compromiso del Malecón 2000 de fungir como un espacio abierto a la cultura y al talento local.