Fernández Strauch, que tenía 26 años cuando quedó varado en la montaña, era uno de los que organizaba y distribuía los alimentos entre sus compañeros, junto a sus primos Eduardo y Adolfo Strauch.
Después de más de un día de búsqueda, la mujer fue avistada por un buque de carga en las aguas cerca de la punta sur de la península de Boso, 37 horas después de su desaparición.