Quito pide un giro de timón
María Belén Arroyo viernes, 15 marzo 2019 - 06:35
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En Quito, el número de indecisos era mayor que en Guayaquil. La ciudad más poblada del Ecuador, con más de 2,7 millones de habitantes, enfrenta problemas tan críticos, como déficit en la recolección de basura, que plantearán un serio desafío al nuevo Alcalde.
La capital es la ciudad más poblada del Ecuador, según la última cifra del Instituto Ecuatoriano de Estadísticas y Censos (INEC). No solo vive un momento complicado: clama un cambio en su modelo de dirección.
“Una elección se organiza a partir de la matriz cambio-continuidad. Esto implica que se reconozcan ciertos elementos de la actual administración para que se continúen en la siguiente. Pero en términos de continuidad, el elector parece pedir que no se mantenga prácticamente nada en el período que está por empezar”, advierte la analista Paulina Recalde, principal de la firma Perfiles de Opinión.
¿Qué pasó con la capital, ciudad donde viven más de 2,7 millones de habitantes? La percepción general es que la ciudad retrocedió.
Según el experto en temas sociales Santiago Nieto, de Informe Confidencial, “Usualmente consultamos qué sueñan los habitantes de una ciudad. Antes, encontrábamos que pensaban que Quito estuviera a la par de capitales como París, Londres; para nuestra sorpresa, hallamos que ahora piden que vuelva a tener la cobertura de servicios básicos. Eso significa un retroceso”.
El nivel del descontento que halló Perfiles de Opinión es el más alto del país: 28 por ciento se considera insatisfecho con la capital.
Para los encuestadores, fue un descubrimiento revelador que a los quiteños no solo les inquietan la inseguridad y la situación económica. El tercer elemento de preocupación es la deficiencia en el sistema de recolección de basura.
El problema tuvo su pico en 2017, por daños en los equipos recolectores. Si bien en 2018 el Municipio mejoró el índice de recolección, la cobertura aún no alcanza niveles óptimos.
Quito genera más de 2.000 toneladas diarias de basura. Recoger cada tonelada significa un costo de 65 dólares para la ciudad. Mejorar el servicio es una deuda que deja el alcalde Mauricio Rodas a su sucesor.
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