Otto Sonnenholzner: "No le tengo miedo a las crisis"
Según el Instituto de Historia Familiar de España, el nombre alemán Otto deriva de una raíz germánica que significa “riqueza, joya, tesoro”. Y dice también esa descripción que quienes llevan ese nombre “suelen conseguir el éxito gracias a su encanto y magnetismo natural”.
Hace apenas cinco años, prácticamente nadie lo conocía. Nadie hasta que el presidente Lenín Moreno tuvo que cambiar por segunda vez de “copiloto”, tras las indelicadezas penales de Jorge Glas y María Alejandra Vicuña. El 11 de diciembre de 2018 la Asamblea Nacional lo proclamó como Vicepresidente de la República. Consciente de que su apellido es muy difícil de pronunciar y recordar, empezó pidiendo: “Solo llámenme, Otto”.
Tenía 35 años y su frescura cautivó. La líder indígena Lourdes Tibán expresó: “Otto no es político, es un extraordinario periodista que ha hecho patria desde su micrófono”.
Sus primeras tareas fueron el seguimiento del Diálogo Social Nacional que había emprendido el gobierno y además, ser parte de la agenda sostenible y la atracción de inversiones. Eso lo levó a un primer periplo por el país y también al exterior. Durante las protestas de octubre de 2019, se mantuvo cercano al Primer Mandatario que esos días hizo de Guayaquil la sede de su gobierno.
En febrero de 2020 y a pesar de que China empezaba a cerrarse por la naciente pandemia, Sonnenholzner anunció su visita a mediados de marzo al gigante asiático. “Voy a China a promocionar estos productos (pitahaya, uvilla, etc) y si regreso con coronavirus por promover nuestra marca, regreso contento igual”, expresó. La idea no fue bien recibida, sobre todo en las redes sociales. Un médico dijo que la iniciativa era irresponsable por los riesgos de contagio. El anuncio, el 29 de febrero de que el virus ya estaba entre nosotros, frustró el viaje.
¿La pandemia lo catapultó? ¿Cuáles son sus propuestas? Estas y más preguntas fueron respondidas por Otto Sonnenholzner en entrevista con Vistazo. Aquí la conversación completa:
