“Temo que la delincuencia esté organizada y el Estado, desorganizado”, Iván Saquicela
“Temo que la delincuencia esté organizada y el Estado, desorganizado”. Quien así habla es el presidente de la Corte Nacional de Justicia, Iván Saquicela Rodas, en entrevista exclusiva con Vistazo. Advierte que el crimen organizado busca la forma de meterse en las esferas del poder para lograr impunidad, y abusan de recursos como el habeas corpus.
Pidió la extradición del expresidente Rafael Correa el 21 de julio. Días antes, el exmandatario sentenciado a ocho años de cárcel por cohecho habría obtenido el estatus de refugiado en Bélgica. Iván Saquicela Rodas preside la Corte Nacional de Justicia desde febrero de 2021. Explica a Vistazo que inició el trámite apenas estuvo listo y blindado el proceso. Revela que analizó un caso emblemático de extradición fallida, que un predecesor suyo no pudo concretar porque se deslizó un error. El diablo está en los detalles: ese prófugo de la justicia ecuatoriana, Ramiro González, disfruta su libertad en un país que no permite un segundo intento de extradición.
Una jueza de Manglaralto liberó a un ciudadano de origen holandés, procesado por narcotráfico. Esa persona iba a ser extraditada a ese país. ¿Le sorprende lo que está pasando?
Debo decir con franqueza, no solo estoy sorprendido sino indignado. He sido de los funcionarios que más respetan la independencia de los jueces y defiendo la institucionalidad de la Función Judicial. Cuando ocurren estos actos no puede haber espíritu de cuerpo. Éste es un caso que está en mi conocimiento por extradición. Ordeno la detención con fines de extradición, estaba en ese proceso. A mitad del camino interviene una jueza sin competencia para esto. Cuando hay un habeas corpus se debe notificar al juez que conoció el expediente, en este caso yo, no me notifican. Éste es un acto irreirregular que puede sentar precedentes nefastos en la justicia constitucional. Por ello he pedido al Consejo de la Judicatura que suspenda a la jueza con medida cautelar, que le investigue administrativamente.
El habeas corpus que significó la excarcelación para Jorge Glas generó un efecto cascada y ahora abundan los recursos para liberar delincuentes. ¿Es así?
Coincido en que algo está sucediendo. Es importante que la jurisprudencia constitucional delimite dos acciones: la acción de protección y el habeas corpus. En ambas hay problemas. El objetivo es que la Corte Constitucional delimite sus alcances y límites. Con el habeas corpus la Corte Constitucional debería decir quién es el juez competente cuando hay un caso de ejecución de condena; una sentencia firme resuelta en fuero de Corte Nacional.
¿Cuándo se recurre al habeas corpus?
Es una institución jurídica a la cual recurre la persona que considera que está privada ilegalmente de la libertad. O estando legalmente detenida, corren peligro su vida o su integridad. En estos casos acude donde un juez. ¿Qué sucede? Se dicta habeas corpus para personas privadas con sentencia en firme, con condena, personas que están cumpliendo la condena. Como el caso del exvicepresidente Glas, quien cumplía condena por orden del máximo tribunal que es la Corte Nacional y resulta que un juez de Manglaralto contradice todo lo resuelto.
¿Le preocupa?
En lo personal estoy preocupado e indignado. La Corte Nacional y la Sala Penal han resuelto casi una treintena de casos relevantes. Yo mismo he sido parte del juzgamiento del caso Sobornos, donde está justamente incluido el señor Glas; he conocido el caso de asociación ilícita, los casos del exministro de Electricidad Alecksey Mosquera; de Carlos Pólit, de Pedro Delgado. No hemos cumplido nuestro trabajo para que se pongan en riesgo la seguridad jurídica y la lucha contra la corrupción por estos habeas corpus notoriamente irregulares. Otros, cuando menos están en tela de duda y tienen que ser investigados. Como presidente de la Corte envié un oficio a la Corte Constitucional, le he pedido a su presidente que conversemos para saber por qué llegamos a esto y cómo corregir. Y le he pedido que seleccione sentencias dictadas en materia de habeas corpus y de acción de protección, para que le diga al país qué se puede hacer y qué no.
¿Las mafias aprovechan del habeas corpus?
Me atrevo a decir que sí. Las mafias abusan del recurso. ¿Qué dice la criminología? La delincuencia organizada para lograr impunidad pretende meterse en las esferas del poder, que incluye la Función Judicial; va a encontrar debilidades, nudos, cuando no, corrupción o amenazas. Temo que la delincuencia esté organizada y el Estado desorganizado.
¿Está permeada la institucionalidad pública por el crimen organizado?
Sí, y por ello creo que la respuesta al crimen organizado no es sencilla. Pero necesariamente pasa por una institucionalidad fuerte, fortalecer las instituciones democráticas, la seguridad jurídica, no es cuestión de confiar por fe, sino porque vamos construyendo un aparato institucional y normativo.
¿Qué está pasando con las acciones de protección?
Ésta es una institución jurídica en la cual cuando las personas nos vemos afectadas en cualquier derecho constitucional, un derecho humano fundamental, acudimos ante un juez para pedir que cese el efecto del acto violatorio de nuestros derechos. El derecho es un medio para conseguir fines sociales, es un medio para conseguir la libertad, la justicia, la paz, la armonía social. Ahora, nos corresponde analizar cómo estos medios están siendo buenos o malos en la sociedad.
¿Hay abuso de la acción de protección?
Está siendo usada y abusada. Daría la impresión de que no existen otras herramientas jurídicas. Lo más grave es que corremos un riesgo. Nos hará un daño irreparable al derecho y a la democracia la judicialización de la política y la politización de la justicia. Esperamos que la acción de protección, así como el habeas corpus, tengan una delimitación y alcance específicos.
La presidenta de la Asamblea recurrió a una acción de protección para evitar ser evaluada.
De varias temáticas y problemáticas de la política, a través de la acción de protección se pretende que dirima la justicia. Les digo a los judiciales del país: finalmente pierde la justicia. Pongo un ejemplo, el caso del exalcalde de Quito, señor Yunda; fue sometido vía acción de protección un problema político, es grave que se pretenda que se dirima jurídicamente un problema político. El resultado es que el juez queda mal parado, unos estarán políticamente a favor o en contra, por tanto, cualquier resolución del juez hace que termine cuestionado todo el sistema de justicia. Como representante del poder judicial debo decirlo: esto no puede seguir sucediendo.
¿Qué salida plantea?
A mediano plazo es hora de pensar en reformas legales. Lo que vive el país y nuestra propia experiencia nos dicen que con urgencia se debe debatir una reforma judicial. El Presidente Constitucional tiene sus atribuciones, yo las respeto, pero le pido públicamente, ya que habló de la posibilidad de una consulta popular y de una reforma en la justicia. Le pido que abra el debate. Es la oportunidad de ver la estructura de la Función Judicial.
¿Cuál es la estructura que debe tener?
La Corte Nacional tiene limitaciones sus competencias. Deberíamos volver a ser la Corte Suprema de Justicia. Acabamos de ver los problemas que se tienen por la diversidad de jueces con criterios distintos en el país. Muchos pueden decir: ‘¿Qué hace Iván Saquicela?’. Les digo que hago lo que puedo. No puedo hacer más porque necesitamos una Corte Suprema, con atribuciones para dictar Jurisprudencia que determine el criterio para todos los jueces.
¿La dualidad con el Consejo de la Judicatura cómo debe resolverse?
Es un tema que debe evaluarse. Hay que dialogar. En casi todo el mundo existe un consejo de la magistratura. El concepto es que los jueces administren justicia y el Consejo de la Judicatura haga la parte administrativa. En otros países, quien preside la Judicatura es el presidente de la Corte Suprema.
El criterio con que se estableció el poder del Consejo de la Judicatura fue controlar y vigilar los actos de los jueces. ¿Fue errado?
Las normas son medios para conseguir fines. Analicemos cómo nos fue con esos medios. ¿Qué pasó en el país? La metida de manos en la justicia. Hubo un consejo político sobre los jueces, facultado para meterse en las decisiones de jueces y fiscales, con capacidad de amenazar y destituir.
Ese consejo era presidido por un hombre de confianza del Presidente de la época. ¿Su conformación debe ser reformada?
La Constitución de 2008 fue cuestionada en su momento. Hablemos de los tres poderes clásicos, solo la Función Judicial es bicéfala. Qué le parece una Función Ejecutiva con un órgano administrativo de gobierno, administración, control y vigilancia al Presidente de la República. Ésas son las atribuciones del Consejo de la Judicatura. No puede haber un ente extraño a la Función Judicial, constituido por un delegado del Ejecutivo, que es político; un delegado de la Asamblea Nacional, que es político. Hay también un delegado de la Corte Nacional, pero en este caso desde hace tres meses no lo tenemos; y un delegado de la Defensoría Pública y de la Fiscalía General. Ése es el Consejo de la Judicatura. Debemos pensar cuál es el origen de sus delegados y cuál es el alcance de sus atribuciones.
La justicia está deslegitimada a ojos del ciudadano. Sirve para el de poncho.
La delincuencia organizada puede recurrir a conductas tramposas; el delito común no. Hay que ser justos, la justicia todos los días da muestras de jueces honestos que cumplen su trabajo, solo que no nos enteramos mediáticamente. Lo que sí se ha visibilizado son la casi treintena de casos en la Corte en los que se ha resuelto, cuando se ha condenado a un expresidente, a un exvicepresidente y a altísimos funcionarios del Estado. Lo que digo no es virtud, es cumplir nuestro deber.
¿Un acuerdo político pudo incidir en el tema Glas?
Soy un judicial y mis opiniones son jurídicas. No puedo dar opiniones políticas. He hecho una exposición propositiva.
¿En estricto derecho Jorge Glas debería seguir en prisión?
Al momento de la entrevista está pendiente un recurso de apelación; no puedo dar una opinión.
¿Por qué firmó recién la providencia para la extradición del expresidente Correa?
Firmé la primera providencia que inicia el pedido de extradición. Al hacerlo no tenía información de un supuesto asilo, pero cumplo mi deber en lo técnico jurídico.
¿Por qué ahora y no antes?
La extradición del ciudadano Ramiro González fracasó. Hay que preparar un pedido de forma fundamentada en Derecho. El propio abogado de Correa dijo que jamás habría extradición porque el convenio con Bélgica es muy incipiente y básico. Se tuvo que esperar que se den condiciones. Ecuador se inscribió en un instrumento internacional de Naciones Unidas en la Lucha contra la Corrupción mandando una nota verbal, cosa que era atribución de Cancillería y no mía, eso permite la extradición con varios países. “En un pedido de extradición no podemos cometer un mínimo error. A un prófugo de la justicia ecuatoriana (Ramiro González) se le pidió anteriormente, por una falla, el trámite quedó trunco porque no hay segundo intento”.
