Una de las soluciones caseras más populares, y respaldadas por la ciencia para la limpieza del hogar es la mezcla de sal en grano y bicarbonato de sodio, y es que no solo sirve para que el inodoro luzca como nuevo, sino que desinfecta superficies y elimina malos olores.
Esta alternativa es económica y ecológica, ya que utiliza ingredientes accesibles que comúnmente se encuentran en la cocina. Además, no son tóxicos y permiten una limpieza profunda sin necesidad de recurrir a productos químicos agresivos.
Lea también: ¿Cómo quitar el mal olor de la ropa deportiva?
La naturaleza alcalina y ligera abrasividad del bicarbonato hacen de este ingrediente un acertado producto para blanquear y desodorizar naturalmente; por lo que unido a la sal gruesa, que es un abrasivo natural que ayuda a remover suciedad, crean una mezcla ideal y casera para la limpieza.
Paso a paso: cómo limpiar el inodoro con sal y bicarbonato
Esta receta se recomienda usarla cada 15 días y te ayudará a combatir el sarro, las manchas, así como ablandar residuos orgánicos que puedan obstruir las cañarias.
Prepara la mezcla: combina dos cucharadas o 250 gramos de sal gruesa, y dos cucharadas o 250 gramos de bicarbonato de sodio. Puedes agregar unas cinco gotas de aceite esencial (lavanda, limón o menta) para aportar un aroma agradable. Aplica la solución: vierte la mezcla en el inodoro y asegúrate de esparcirla bien por todos los lados. Deja actuar: deja reposar la mezcla en el inodoro durante toda la noche. Esto le dará tiempo suficiente para que la reacción química descomponga las impurezas incrustadas. Finaliza la limpieza: a la mañana siguiente, calienta agua hasta que hierva y viértela con cuidado en el inodoro. Esto ayudará a disolver cualquier residuo restante. Tira de la cadena: descarga la cadena para que el agua arrastre toda la suciedad y los restos desprendidos. Además, puede ser útil para limpiar los azulejos y devolver el brillo a la ducha, por lo que su uso para el cuidado de todo el baño es un acierto.
Lea también: Tender tu cama en las mañanas te puede volver millonario, según estudio
Otras aplicaciones de la sal y el bicarbonato en el hogar
Más allá de la limpieza del baño, la sal y el bicarbonato de sodio, unido al limón son un trío infalible para mantener un hogar limpio. Estas son algunas de las propiedades que tienen cuando se juntan estos tres ingredientes:
Limpieza de grasa: sus propiedades ayudan a disolver la grasa y la suciedad en superficies de la cocina, utensilios y otras áreas difíciles de mantener. Desinfectantes: tienen propiedades antimicrobianas que eliminan bacterias y gérmenes de forma segura, sin los químicos agresivos de los productos comerciales. Desodorizantes: son excelentes para neutralizar olores desagradables en la heladera, el baño o incluso la ropa. En ciertas prendas manachadas su uso puede ser muy efectivo. Prepara tu propio limpiador casero con sal y bicarbonato en tres pasos
1. Prepara la base: licúa las cáscaras de 2 o 3 limones con un poco de agua hasta obtener una mezcla suave. Cuela la mezcla para separar los restos sólidos. 2. Agrega los ingredientes: incorpora 3 cucharadas de bicarbonato de sodio y 1 cucharada de sal. Si quieres potenciar la fórmula, añade 3 cucharadas de jabón líquido y 3 cucharadas de alcohol. 3. Mezcla y envasa: revuelve bien todos los ingredientes hasta que se disuelvan por completo. Vierte la solución en una botella con rociador para facilitar su uso.