Incautación de bienes, zonas de seguridad, jueces especializados, detención por formar parte de una banda, allanamientos sin orden judicial y otras propuestas se asemejan al modelo de Nayib Bukele.
El gobierno de Bukele es un aliado clave de Trump en su política antiinmigrantes, y recibió en poco más de un mes a 288 deportados, 252 de ellos venezolanos.
Bukele lanzó su sorpresiva oferta de recibir a "peligrosos criminales" enviados por Estados Unidos cuando en febrero recibió al encargado de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, en su hogar.
En el Cecot, los pandilleros son vigilados las 24 horas del día con cámaras y guardias, y son sometidos a un riguroso encierro, sin posibilidad de recibir visitas de sus familiares.