Día de Abrazar a tu Gato 2025: cómo hacerlo bien y cuándo evitarlo

Abrazarlos puede mejorar tu salud y fortalecer el vínculo con tu felino, pero no todos los gatos lo disfrutan. Aprende a leer sus señales antes de intentarlo.
Ligia Proaño Fabara
Día de Abrazar a tu Gato 2025: cómo hacerlo bien y cuándo evitarlo
Una mujer feliz abrazando a su gato.

Cada 4 de junio se celebra el Día de Abrazar a tu Gato, una fecha creada para reforzar el vínculo afectivo con estos animales tan independientes como adorables.

Pero, aunque los abrazos son una muestra de cariño para los humanos, no todos los felinos los reciben con agrado. Aquí te contamos cómo hacerlo bien y cuándo evitarlo.

La ciencia ha demostrado que tener un gato no solo brinda compañía, sino también beneficios físicos y emocionales.

Un estudio de la Universidad de Minnesota encontró que los dueños de gatos tienen un 30% menos riesgo de morir por enfermedades cardiovasculares.

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Además, el contacto afectivo con mascotas, como los abrazos suaves, puede aumentar los niveles de oxitocina, conocida como la “hormona del bienestar”, y reducir la ansiedad y el estrés.

Una mujer abrazando a su gato.

Algunos disfrutan del contacto humano, mientras que otros prefieren mantener su espacio.

Un estudio publicado en el Revista de Comportamiento Veterinario indica que los gatos que fueron adecuadamente socializados entre las 2 y 7 semanas de edad toleran y disfrutan más el contacto físico con personas.

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La Sociedad Internacional de Medicina Felina también sostiene que las experiencias positivas durante las etapas tempranas de desarrollo son clave para que un gato acepte muestras de afecto como los abrazos.

Para saber si un gato está abierto a este tipo de interacción, observa estas señales:

- Se frota contra ti.

- Se sube a tu regazo por iniciativa propia.

- Tiene el cuerpo relajado y ronronea.

Una mujer abrazando con delicadeza su gatito.

- Acércate con calma y deja que te huela.

- Sujétalo con suavidad, sin apretarlo.

- Evita zonas sensibles como su panza, a menos que esté completamente relajado.

- Observa su lenguaje corporal. Si se pone tenso, mueve la cola bruscamente o intenta soltarse, es mejor detenerte.