El Municipio de Guayaquil dispuso rehabilitar la antigua maternidad Enrique Sotomayor para poder tratar ahí a las personas contagiadas con el virus COVID-19, así como a los casos sospechosos.
“He propuesto al Ministerio de Salud un centro como la antigua maternidad para poder aislar a todas las personas que han sido contagiadas con el COVID-19 y las personas que a su alrededor puedan ser o hayan sido contagiadas. Tenemos como ciudad la obligación de aislar a las personas que hayan sido contagiadas de coronavirus, es obligatorio hacer un cerco epidemiológico”, recalcó la alcaldesa.
Según lo anunciado por Cynthia Viteri, personal del Municipio y del Ministerio de Salud recorrieron el inmueble que pertenecía a la Junta de Beneficencia de Guayaquil para analizar la posibilidad de su rehabilitación. Hoy la antigua maternidad es de propiedad privada, pero el Municipio alquilará el espacio.
“Vamos a poner camas, vamos a poner sábanas, vamos a rehabilitar el sistema eléctrico, el de agua potable, toda la infraestructura necesaria que requiera el Ministerio de Salud para que en Guayaquil la gente contagiada esté realmente aislada. También pondremos la alimentación y el lavado de las ropas dentro de este sitio”, señaló Viteri.
Igualmente informó que los ocho Hospitales del Día estarán abiertos, al igual que las 36 clínicas móviles y todos los puntos municipales de atención a la salud. Viteri dijo también que el personal que atiende en estas instituciones tiene todo el equipo para mantenerse protegido y proteger a quienes se hagan atender en estos, contra el coronavirus.
El Gobierno central se encargará de destinar médicos, medicina y un cerco de seguridad apenas esté rehabilitada la antigua maternidad.
“No pueden las personas detectadas con coronavirus estar en sus casas, guardando aislamiento, deben estar en un sitio seguro que les garantice a ellos la atención adecuada y que los aleje del resto de la ciudadanía hasta que pase esta pandemia que estamos viviendo”, agregó la alcaldesa.
Al momento, las personas que tienen COVID-19 con síntomas leves no están hospitalizadas, pues permanecen en vigilancia en casa.