Julio Alberto Martínez, conocido como ‘Negro Tulio’ y máximo dirigente de la agrupación delictiva ecuatoriana Chone Killers, fue condenado a 34 años y 8 meses de prisión. La sentencia se dictó tras su detención en Panamá a finales de mayo de 2024, y fue anunciada oficialmente por la Policía Nacional del Ecuador.
#ACTUALIZACIÓN II
— Policía Ecuador (@PoliciaEcuador) May 24, 2025
SENTENCIA PARA ALIAS NEGRO TULIO OBJETIVO DE ALTO VALOR Y DOS SUJETOS MÁS POR TERRORISMO
Mediante un arduo proceso investigativo y coordinaciones nacionales e internacionales, el día 23 de mayo de 2025 culminó la audiencia de juzgamiento en contra de tres... pic.twitter.com/K5Np1RjGGt
La pena también contempla una multa económica equivalente a mil salarios básicos (aproximadamente 470.000 dólares) y afecta igualmente a dos miembros adicionales de esta organización, quienes enfrentan cargos similares.
Las autoridades sostienen que el proceso judicial se basó en una extensa labor investigativa, en la que se recopiló evidencia que vincula a Martínez con acciones terroristas, incluyendo el asesinato de fiscales, ataques armados con explosivos contra estaciones de servicio, sedes policiales y espacios públicos.
Antes de ser capturado, el cabecilla de los Chone Killers era objetivo prioritario de las fuerzas del orden. Estaba implicado en múltiples delitos, entre ellos terrorismo, asociación ilícita, asesinato y robo agravado. Además, se le responsabiliza del homicidio de dos fiscales y varios agentes de la Policía.
El operativo que permitió su arresto fue llevado a cabo por autoridades panameñas, quienes detuvieron a Martínez junto con otras cinco personas —cuatro ecuatorianos y un ciudadano colombiano— en el interior de una residencia. Entre los capturados se encontraba su esposa, Alexandra E.
Lea | La corrupción política entregó a Durán al narco: esta es la historia
Originados como una pandilla barrial, los Chone Killers evolucionaron hasta convertirse en una de las redes delictivas más peligrosas del Ecuador. Su ascenso los llevó a ser considerados una estructura terrorista, según el decreto emitido por el presidente Daniel Noboa a inicios de 2024, cuando declaró un conflicto armado interno contra el crimen organizado.
Actualmente, el grupo es parte de las mafias que operan en el país y que han sido responsables del aumento de homicidios y violencia, colocando al Ecuador entre los países con más altos índices de criminalidad en América Latina.