Carlo Acutis, el joven que murió en 2006 con 15 años y al que Italia conoce como "el patrón de la web" por haberse dedicado a hablar de su fe y ayudar a los demás a través de la tecnología, ha sido hoy beatificado en Asís (centro de Italia).
"Era un chico como muchos otros que podía encontrarse con sus amigos todos los días", pero en su mochila llevaba, "además de los libros de bachillerato, una fe tan profunda que llegó al corazón de quienes lo conocieron" personalmente "y en la red", ha recordado este sábado en las redes sociales el alcalde de Milán, donde vivía Acutis, Giuseppe Sala.
Acutis ha sido beatificado en una ceremonia celebrada en la basílica de San Francisco y ante la presencia de decenas de familiares, amigos y personas que lo conocieron por internet.
Nació en 1991 en Londres y falleció en Italia 2006, con 15 años, por una leucemia fulminante. Parecía una gripe normal. Nadie se lo esperaba. Pero al entrar en el hospital, Carlo confió a su madre: “De aquí ya no salgo”. Efectivamente, se le diagnosticó una de las peores leucemias, de tipo M3. Diría a sus padres: “Ofrezco al Señor los sufrimientos que tendré que padecer por el Papa y por la Iglesia, para no tener que estar en el Purgatorio y poder ir directo al cielo”. Pidió la Unción de Enfermos y murió el 12 de octubre.
Su beatificación es una de las más rápidas de la historia de la Iglesia católica, ya que sólo han pasado 14 años desde su muerte.
El papa Francisco lo declaró venerable en el verano de 2018, señalándolo como un ejemplo para todos los jóvenes en su exhortación tras el sínodo dedicado a ellos, "Christus vivit".
Los medios de comunicación explican que se trata del primer beato "millennial", nativo digital, y ejemplo de que la tecnología puede ser muy positiva.
El milagro
“¡Quiero parar de vomitar!”. La petición de un niño brasileño de seis años que debido a una malformación no podía dejar de vomitar y su total e inexplicable curación, en el momento de hacer la oración al venerable Carlos Acutis fue considerado milagro suficiente para que el venerable pase a la fase II, la beatificación.
La Congregación para las Causas de los Santos reconoció como milagro necesario para su beatificación la curación, considerada inexplicable por algunos expertos, ocurrida el 12 de octubre de 2013 en Campo Grande en Brasil, donde vivía un niño sudamericano nacido en 2010 con una malformación congénita del páncreas, órgano que en el niño estaba prácticamente dividido en dos.
Los hechos tuvieron lugar en la capilla de Nuestra Señora Aparecida de Campo Grande. Exactamente cuatro años después de la muerte de Carlo. Un niño que sufría un páncreas anular se acercó a besar una reliquia del futuro beato. El Padre Tenorio, vice postulador de la Causa de Carlos Acutis señaló que “la enfermedad causaba que el niño vomitara todo el tiempo, lo que le debilitaba mucho puesto que todo lo que comía lo devolvía”. En la fila para la bendición de la reliquia, el niño le preguntó al abuelo lo que debía pedir a lo que éste contestó: “dejar de vomitar”. Desde ese momento ya no vomitó más y las pruebas médicas demostraron que estaba completamente curado.
Solo una cirugía compleja y peligrosa podría haber eliminado el problema, pero la cirugía nunca se realizó porque el niño se recuperó después de una oración especial celebrada por un sacerdote en presencia de una reliquia de Carlo, una trozo de pijama.
Monseñor Ennio Apeciti, responsable de la Oficina para las Causas de los Santos de la Archidiócesis de Milán, dijo: “su fama de Santidad se ha difundido por todo el mundo, de forma misteriosa, como si alguien quisiera darlo a conocer. En torno a su vida ha sucedido algo grande, frente a lo cual me arrodillo”. “Está siendo sacerdote desde el cielo”, dice su madre, “él, que no conseguía entender por qué los estadios estaban llenos de gente y las iglesias vacías, repetía: ‘tienen que ver, tienen que entender’”.