Sostenibilidad

Ecuador se suma a la objeción latinoamericana que suspendió la plenaria final de la COP30

Varias delegaciones, incluida la ecuatoriana, reclamaron falta de transparencia en la aprobación de acuerdos y denunciaron que no se les permitió intervenir antes del cierre.

Varios países latinoamericanos, entre ellos Argentina, Colombia, Ecuador, Panamá, Uruguay y Paraguay, objetaron este sábado la toma de decisiones en la plenaria de clausura de la cumbre climática COP30 y llevaron a la suspensión de la sesión por cerca de una hora.

Los delegados se quejaron principalmente por el hecho de que la presidencia brasileña no les cedió la palabra antes de decretar la aprobación de los acuerdos alcanzados en la cumbre de Belém. La objeción llevó al presidente de la COP30, André Corrêa do Lago, a suspender la sesión para consultar a las partes; al regreso de la sesión pidió disculpas, pero rechazó volver atrás en la votación una vez batido el martillo.

"No nos dejan otra opción que presentar una objeción. Esta es la COP de la verdad y la confianza. No nos dejan otra opción tras los problemas de procedimiento observados en esta sesión plenaria".
-Daniela Durán, delegada de Colombia.

Las quejas por los procedimientos no se limitaron a la sesión de clausura, sino a la forma de conducir las negociaciones a lo largo de las dos semanas de conferencia. La jefa de delegación de Panamá, Ana Aguilar, dijo estar "extremadamente decepcionada" porque Corrêa do Lago prometió un "proceso transparente" y considera que no se cumplió.

La COP30, que comenzó el pasado 10 de noviembre, debe concluir este sábado con la sesión plenaria en la que se han aprobado los acuerdos por consenso entre los 195 países presentes en la conferencia.

El debate sobre hidrocarburos y la hoja de ruta regional

El presidente de la cumbre, André Corrêa do Lago, anunció al inicio de la sesión de clausura que impulsará dos hojas de ruta paralelas, una para abandonar gradualmente los hidrocarburos y otra para combatir la deforestación.

Colombia fue uno de los gobiernos que más cuestionó el texto principal. El presidente Gustavo Petro afirmó que su país se opone a una declaración que no mencione la responsabilidad de los combustibles fósiles en la crisis climática, y recordó que su delegación llegó a Belém con propuestas para eliminar progresivamente estos recursos, reconocer la biodiversidad como solución climática y promover una reforma financiera internacional.

Tras la publicación del documento final sin el tema de hidrocarburos por la negativa de países árabes, más de veinte países, entre ellos Chile, Colombia, España y México, anunciaron un compromiso político paralelo para avanzar en esa transición. La primera cumbre será en 2026 en Bogotá.

La Declaración de Belém, presentada en la COP30, reúne a los países firmantes en un compromiso común para avanzar hacia una transición “justa, ordenada y equitativa” lejos de los combustibles fósiles, alineada con la meta de limitar el calentamiento a 1,5°C. El documento retoma evidencia científica y señala que la producción, subsidios y licencias petroleras actuales son incompatibles con ese objetivo.

El texto también reconoce que este proceso requerirá cooperación internacional, financiamiento, transferencia tecnológica y medidas sociales para proteger a trabajadores y comunidades dependientes de la industria fósil. Entre los puntos clave, se incluye acelerar energías renovables, mejorar eficiencia energética y eliminar subsidios ineficientes a combustibles fósiles.

Más leídas
 
Lo más reciente