Fausto Lara
jueves, 10 diciembre 2020 - 02:06
La certificación de Mejores Prácticas en Acuicultura (BAP, por su sigla en inglés), es una de las más importantes en la industria camaronera a nivel global, pues la misma, asegura altos estándares de abastecimiento responsable y seguridad alimentaria a lo largo de la cadena de valor del crustáceo.
Ecuador, al ser uno de los principales exportadores del camarón en el mundo, garantiza la calidad de sus productos acuícolas con esta y otras normas de gestión que exigen los mercados compradores.
Por ello,
la planta de la empresa Cargill en nuestro país, ubicada en Durán, reafirma sus altos estándares de calidad en toda su cadena productiva de alimento balanceado con la actualización de su certificación BAP.
"Esta certificación permite abrir posibilidades en los mercados y genera confianza con los clientes que se encuentran certificados bajo esta regulación. Lograrla nuevamente demuestra el compromiso y trabajo de todo el equipo", manifiesta Ángel Gómez, Managing Director CQN LN de Cargill.
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Según la compañía, su propósito es alimentar al mundo de forma segura, responsable y sostenible; ayudando a los agricultores a prosperar, conectando mercados y ofreciendo a los consumidores productos de calidad.
Bajo esta visión,
con la actualización de la certificación BPA, Cargill reafirma y garantiza su compromiso con el país, demostrando una vez más que es un proveedor que cumple con las exigencias y estándares de las normas internacionales con la implementación de sistemas de gestión que garanticen la calidad, seguridad, trazabilidad y sustentabilidad de sus productos.
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