Los cuerpos de los 11 militares asesinados en Orellana recibieron honores en Sucumbíos y fueron trasladados a la capital, para su velatorio en la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro.
Uno equipo de militares fue emboscado por los Comandos de la Frontera con explosivos, granadas y fusiles, en el sector de Alto Punino, lo que dejó once militares muertos y uno herido.