La mandataria adelantó que habrá una reunión con los gobernadores de los estados de la frontera norte de México para alistar la estrategia de atención a los deportados.
Sheinbaum fue enfática en decir que “no” se aceptará una estrategia de “invasión suave” y argumentó que en la llamada que tuvo la semana pasada con Trump abordaron el tema de seguridad.
Mientras Ecuador ha adoptado una postura abierta a reconciliación, México insiste con con la búsqueda de sanciones con base a la irrupción, que consideran como una "invasión".