La Corte Internacional de Justicia dictaminó que las décadas de ocupación israelí de los territorios palestinos es "ilegal" y el tribunal con sede en La Haya instó a ponerle fin
"Las personas no fueron heridas ni asesinadas: fueron carbonizadas", lamenta Mohamad Hamad, al día siguiente del sangriento bombardeo israelí que golpeó un campo de desplazados.
Tras casi siete meses de guerra, los habitantes de Rafah celebraron el anuncio de Hamás en las calles, entre lágrimas de felicidad, cánticos de "Allahu Akbar" ("Dios es el más grande") y disparos.