El Oro, la provincia que mira nuevos horizontes económicos

En la provincia de El Oro, al sur del Ecuador, la producción de los sectores agrícolas y mineros aumenta, principalmente para el mercado exterior. No obstante, El Oro afronta una transición en las fuentes de ingreso para las cuales se prepara constantemente. Varios sectores empiezan a surgir y generan réditos para esta, la quinta provincia con mejor facturación del Ecuador.

Desde que se desató el “boom bananero” , entre las década de los 40 y 50, El Oro se convirtió en el referente nacional de la producción y exportación de la fruta. Luis Aguilar, presidente de la Cámara de Comercio de Machala, explica que la provincia se caracteriza la diversidad de productores en múltiples espacios, a diferencia de otras zonas donde pocos producen en grandes superficies. “Eso genera una mejor distribución de la riqueza por la venta en ferias, por ejemplo. Además, los pequeños productores forman sus asociaciones y fortalecen la economía de escala”, añade.

Según el extinto Ministerio de Comercio Exterior, en El Oro se sitúan la mayor parte de los pequeños productores de banano del país, aproximadamente el 42 por ciento. Con respecto a la superficie cosechada, El Oro es la segunda provincia con más hectáreas (43.300), superada por Los Ríos.

Una de las fortalezas de la provincia en la producción bananera es su clima. Hugo Castro, gerente general de la exportadora GinaFruit, califica a la zona como la mejor para el crecimiento del banano porque el clima es “un poco más frío que Guayas o Los Ríos. La fruta sale más fuerte y tolerante a los estropeos y daños”, indica. Agrega que otra ventaja es el agua que reciben de sus ríos: es de buena calidad y no soportan inundaciones.

Recientemente, el sector bananero se ha visto afectado por la caída internacional de sus precios. No obstante, Castro reconoce que al sector se le avecinaba una crisis desde antes por la logística de barcos y la falta de contenedores. “La causa principal de los problemas del banano comienza y termina en el tema naviero”, sentencia.

El Oro alberga a Puerto Bolívar, cuya terminal portuaria es administrada por la multinacional turca Yilport. Por ese puerto pasaron el 21,39 por ciento de las exportaciones de banano del país en el último año. El resto salieron por Guayaquil. Alfredo Jurado, gerente regional de Yilport, manifiesta que desde que asumieron la concesión han aumentado su protagonismo. “Antes salía el 25 por ciento del banano de la zona sur del país, desde que llegó Yilport subió al 60 por ciento”, señala.

Expone que las condiciones que ofrece el puerto son ideales para el transporte marítimo como menor tiempo de navegación en los canales de acceso o que no enfrentan mareas. Sin embargo, las líneas navieras todavía son un impedimento. Los exportadores bananeros aseguran que prefiere enviar su mercadería por contenedores en otros puertos para un mejor control de calidad y de la cadena de frío, además de disponer de varias rutas. “No obstante, Puerto Bolívar es una ventaja para agilizar la operación de los pequeños productores”, comentan.

Otro nicho de mercado importante por explotar es atraer a los importadores cuencanos de mover su mercadería por Puerto Bolívar. Para dicho propósito, junto a la Cámara de Comercio de Machala realizan acercamientos con el sector empresarial. Del mismo modo, el sector minero también es relevante para la provincia y el puerto. Jurado revela que en Puerto Bolívar reciben diariamente 90 y 100 camiones con concentrado de cobre para exportar. “Para final de año se espera doblar la cifra”, anuncia.

DIVERSIFICACIÓN

Aunque 26 de las 100 empresas más grandes de El Oro tienen relación con el banano, las compañías del sector acuícola se han apoderado de la provincia. De ese grupo, 31 compañías se dedican al criadero, preservación y conservación de camarones, así como a la venta de productos acuícolas.

Promaoro, la empresa que mayor facturación generó en la provincia, se dedica a la exportación de camarón y productos de valor agregado, como hamburguesas o snacks de camarón. Sus voceros explican que la tecnificación ha permitido que tengan mejores ventas. “El mercado nos obligó a ser más eficientes, esto se convirtió en un negocio de volumen”, indican.

Entre esos enumeran a los alimentadores automáticos que bajaron de precio y su masificación permiten que se generen varias raciones en el día, cuando antes eran dos o tres. También los aireadores que mantienen la calidad del agua y la calidad del balanceado que disponen. “Son cambios sustanciales a como era el negocio hace 10 años”, agregan. En 2021, Promaoro logró producir 16.000 libras de camarón en cada una de las 1.000 hectáreas que disponen. Según la FAO, en 2020 la provincia de El Oro produjo el 38 por ciento del camarón nacional. Significó 262 mil toneladas.

Otra de las compañías acuícolas con un destacado crecimiento es Costamarket. La empresa es proveedora de insumos como balanceado fertilizantes, hielo y demás. “Nos dimos cuenta que al camaronero se le complicaba trasladar los insumos a la isla o continente, por lo que somos los pioneros en entregar los productos e insumos a las camaroneras”, cuenta Geovanni Arias, gerente de la compañía. Para esto han invertido alrededor de ocho millones de dólares.

Tanto Promaoro como Costamarket coinciden en que las camaroneras aprendieron a ser más eficientes en sus gastos en la pandemia y que ese know how le generó ganancias después. Reconocen que el potencial del sector camaronero en El Oro es manifiesto y que, al menos durante los dos o tres siguientes años, continuará batiendo récords.

Aguilar (CC Machala) asegura que otro de los sectores con considerable crecimiento es el de salud y medicina. “Se evidenció que había un déficit de propuesta de consultorios, laboratorios y centros médicos”, apunta. Asegura que varias inversiones se han dado en es área, al igual que la infraestructura. Un caso es el del Hotel Veuxor en Machala.

Su gerente comenta que el proyecto nació justamente como una diversificación a los negocios agrícolas de su familia. Además de que amplía la oferta en la ciudad. El hotel se enfoca en recibir a un nicho ejecutivo con gran requerimiento en la calidad de una habitación. Agrega que aportan a la provincia con un hotel de calidad de gente propia orense.

El Oro enfrenta más desafíos. Por ejemplo, buscan modernizar y tecnificar la educación básica y universitaria. De hecho, se está concretando la apertura de un colegio internacional en Machala. La delincuencia es otro factor que frena su desarrollo, pero el mercado internacional obliga a que la provincia siga produciendo.

Este es el listado de las 100 empresas más grandes de la provincia de El Oro.