El control de plagas es esencial para evitar enfermedades infecciosas

Hogares, comercios e industrias están tomando medidas para controlar vectores voladores y roedores. Las empresas del rubro utilizan métodos más eficaces y productos más sostenibles para combatirlos.
Sandra Armijos Medrano
Para el sector comercial e industrial las empresas de control de plagas manejan programas y productos especializados.

La temporada invernal, el estancamiento de agua y el poco saneamiento ambiental hacen que enfermedades como el dengue y la leptospirosis se propaguen entre la población. Hasta marzo pasado, el Ministerio de Salud Pública (MSP) registró 621 casos de la primera en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) y 54 de la segunda a nivel nacional.

Para evitar la propagación de estas enfermedades infecciosas, se recomienda a la población evitar la acumulación de agua en viviendas y patios, pues es el foco de cultivo para el Aedes aegypti, principal transmisor del dengue. Asimismo, para no contagiarse del virus de la leptospirosis se aconseja no hacer contacto con agua sucia o estancada, pues puede estar contraminada con la orina de animales como ratas, perros, gatos y ganado.

Edison Placencio, gerente técnico de FUMIGERBO, explica que esta enfermedad es endémica y que el principal transmisor es la rata, que por las lluvias tiene mayor contacto con los seres humanos y sus orinas están más expuestas.

El especialista aconseja a hogares, comercios e industrias establecer un control de estos vectores mínimo cuatro veces al año. Para esta tarea la empresa utiliza cebos bloques o pellets exclusivos para roedores, por lo que no afecta a las personas ni a otros animales. “Se lo coloca en caminos y guaridas y estos (las ratas) mueren sin dejar ningún olor o producir contaminación en el momento que lo ingieran”, detalla.

La compañía tiene más de 30 años de experiencia en el control y prevención de insectos voladores y rastreros. Placencio destaca que para esta labor trabajan con químicos biodegradables aprobados por el MSP y con certificación internacional EPA. Además, fue una de las primeras en ser calificadas para operar en zonas de muelles, barcos y aeronaves.

Para el control de roedores se ubican estaciones de cebo al exterior de las instalaciones.

El costo del servicio -remarca- depende del grado del problema, para esto se realiza una visita de evaluación, pues cada plaga y lugar requiere de un tratamiento diferente.

“Puede que con un solo control realizado profesionalmente con productos químicos adecuados para esa plaga se la logre eliminar o controlar, pero también hay casos que requieren de dos o tres intervenciones para eliminarla”, explica.

Insumos

Desde hace algunos años las empresas del sector vienen desarrollando métodos más eficaces para combatir todo tipo de plagas. El uso racional de químicos en esta tarea es un punto que cada vez toma más relevancia.

José Villacís, gerente de operaciones de Fumieco, señala que, si bien algunas veces hay que apoyarse en el uso de estos productos para controlar poblaciones masivas, es necesario saber dónde y cuándo aplicarlos.

“Tratamos de no ser químico-dependientes. Lamentablemente, desde los años 50 cuando aparecía un microrganismo lo primero que se nos venía a la mente eran los insecticidas, raticidas o biocidas. Nosotros proponemos otras alternativas como programas de limpieza y saneamiento, con un criterio que minimice el uso de químicos”, alega.

Para el sector industrial, comercial y domiciliario Fumieco ofrece manejo integral de plagas, control de microorganismos y asesoría técnica y sanitaria. Entre los tratamientos que ofrece están: controles no químicos con el uso de trampas de captura mecánicas y de goma, aplicación de productos orgánicos, minerales y sin residual; controles químicos con productos de última generación e inocuos para el ser humano; y control orgánico con tratamientos certificados bajo normas internacionales de Europa y Estados Unidos.

Villacís enfatiza además el uso de mecanismos orgánicos para ahuyentar ciertas plagas silvestres. “En el caso de murciélagos, por ejemplo, debemos cambiar su habitat, ya que tienen un efecto cosmopolita y solo un buen sellamiento físico puede impedir anidamiento, también se los puede ahuyentar con alternativas orgánicas, no toleran la canela, cítricos o la albahaca”, explica.

Ola Ernberg, gerente general de Fumirepcon, señala que el cuidado del medio ambiente es crítico en esta actividad, por lo que utilizan productos con baja dosificación para que sean biodegradables y cuando es posible otros completamente orgánicos, especialmente en empresas alimenticias.

Opciones como el uso de lámparas de rayos UV con láminas adhesivas para atraer a los mosquitos también son comunes.

Fumirepcon ofrece el servicio de desinfección y sanitización, control de plagas, tanto para roedores, insectos rastreros, voladores, virus y bacteria. En el caso de ratas se contempla la instalación de estaciones de cebo al exterior de las instalaciones, de darse infestaciones se usa gas y rodenticidas más fuertes. Su gestión abarca también la reubicación de animales silvestres como gatos, culebras o zarigüeyas.

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Las bacterias de la leptospirosis pueden sobrevivir desde semanas hasta meses en el agua y la tierra contaminadas con orina.