Convenios abren las puertas al mundo laboral

Que una institución de educación superior maneje un importante nivel de relacionamiento con otros actores de la sociedad, llámese empresas o instituciones privadas o públicas, es un punto a favor en su gestión. El contar con convenios ofrece a sus estudiantes la oportunidad de colaborar, ya sea a través de proyectos de vinculación, investigación o prácticas pre profesionales.

Poner en práctica los contenidos teóricos en conjunto con las competencias adquiridas en su formación académica, no solo da un mayor plus a los alumnos, si no también les abre la posibilidad de obtener un empleo.

José Luis Flores, rector Instituto Tecnológico Superior Central Técnico (ITSCT), señala que los convenios tienen un gran peso, sobre todo cuando se ofertan carreras duales donde se demanda de 50 por ciento de horas prácticas.

Actualmente, esta institución ofrece en modalidad tradicional y dual las tecnologías superiores en mecánica industrial; electrónica y electricidad; offset y acabados; y desarrollo infantil integral, las cuales cuentan con tres tipos de convenios: 13 interinstitucionales, 28 de vinculación con la sociedad y 329 de prácticas pre profesionales.

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En los primeros, colaboran con empresas públicas y privadas en proyectos de investigación conjunta, mientras que en los segundos trabajan con los GADs parroquiales y municipales en el desarrollo de obras junto a los docentes y alumnos de las diferentes carreras.

Los convenios de prácticas, por su parte, permiten al estudiantado cumplir en diferentes empresas con sus prácticas pre profesionales (240 horas para las carreras en modalidad tradicional) y duales, estas últimas ocupan el 50 por ciento de tiempo de la carrera (entre 9 o 10 semanas).

“Los alumnos de mecánica automotriz realizan sus prácticas en concesionarios y talleres, los de mecánica industrial van a empresas de producción y los de impresión offset y acabados a imprentas”, detalla Flores.

Asimismo, indica que el instituto tiene un posicionamiento dentro del ambiente empresarial, a tal punto que sus estudiantes son solicitados para la realización de las prácticas.

“Muchos se quedan trabajando en estas empresas. El 90 por ciento de nuestros estudiantes consiguen empleo luego de que se titula”, agrega.

Otro centro de estudios que ha generado una serie de alianzas en beneficio de sus estudiantes es el Instituto Tecnológico Universitario Argos. Su rector, Jorge Calderón, cuenta que al año se firman alrededor de 60 convenios, actualmente el 98 por ciento de estos están operativos, siendo algunos de ellos con las cámaras de Comercio de Guayaquil, de Industrias, Ecuatoriano - China, de la Pequeña Industria, así como empresas de diversos sectores productivos del país.

La unidad de vinculación con la comunidad de Argos coordina con las diferentes áreas del instituto los diversos requerimientos que tienen y en función de ello explora los aliados que podrían participar.

“En el caso puntual de la inserción laboral, hay una de bolsa de empleo para que los estudiantes y exalumnos puedan ser parte de la misma y ante la necesidad de empresas se remiten sus hojas de vida para los procesos de selección... A nuestros egresados se les realiza un seguimiento para conocer dónde laboran, su estabilidad laboral, necesidades de capacitación, si trabajan en un área relacionada sus estudios universitarios, entre otros aspectos.”, menciona Calderón.

Como beneficio adicional, los graduados de Argos puedan acceder a programas de grado o beneficiarse de descuentos para obtener una licenciatura o ingeniería en las universidades Espíritu Santo y Ecotec.

El Instituto Gráfico de Artes Digitales (IGAD) también maneja un programa similar. Su vicerrectora y coordinadora de prácticas pre profesionales, Katiuska Paredes, señala que los alumnos tienen la oportunidad de concluir sus estudios y continuar formándose en otras instituciones, gracias a las alianzas con las universidades Casa Grande y Católica de Santiago de Guayaquil

El IGAD tiene convenios para complementar la formación de cada una de sus especializaciones, es así que ofrece prácticas pre profesionales en varias productoras, agencias de publicidad y empresas.

“De esta forma, los estudiantes se sienten acompañados y respaldados a lo largo de su carrera ya que son innumerables las oportunidades de inserción laboral en sus campos de aprendizaje”, manifiesta Paredes.

El Instituto Superior Tecnológico Japón (ISTJ), también es activo en este proceso, por lo que cuenta con alrededor de 400 convenios con empresas de Quito y Santo Domingo de los Tsáchilas para que los alumnos realicen sus prácticas pre profesionales. Algunos de ellos son los ministerios de Inclusión Económica y Social, y del Trabajo, GADs, Dirección Nacional de Bienestar Social de la Policía Nacional, Asociación Interprofesional de Maestros Artesanos y Operarios de Pichincha, Cámara Artesanal de Pichincha, Consorcio de Escuelas Gastronómicas, Empresa Pública Provincial Santo Domingo Construye, Consejo Nacional de Gobiernos Parroquiales Rurales de la Provincia Santo Domingo de los Tsáchilas y las fundaciones Entorno y Acción Social Cáritas.

Milton Altamirano, rector del ISTJ, afirma que adicionalmente se mantiene una bolsa de empleo y otras estrategias como ferias virtuales de empleo para mostrar el perfil de sus estudiantes.

“Para medir la efectividad de las acciones realizadas se está implementando el Observatorio de empleabilidad y empleo... no solamente nos preocupamos que nuestros estudiantes encuentren trabajo, sino que nos hemos enfocado en tener una incubadora de emprendimientos (INNOVA), cuyo objetivo es apoyar el desarrollo de ideas innovadoras”, comenta.

Este instituto también participa en redes de intercambio y construcción para el desarrollo de proyectos de investigación y vinculación, siendo uno de ellos la Red Iberoamericana de Investigación (RII), la cual genera vínculos directos con otras instituciones de educación superior nacionales e internacionales, fundaciones y empresas con el fin de garantizar la generación, la continuidad de sus estudios y la transferencia de conocimiento con innovaciones tecnológicas.

El dato:

· 93 carreras en modalidad dual se ofertan en el país, más de 500 convenios se han suscrito entre los institutos que ofrecen este tipo de formación, según la Senecyt.

· La Senescyt y el SECAP firmaron este año un convenio para que estudiantes y docentes de 18 institutos superiores públicos, puedan utilizar su infraestructura física y equipamiento para el proceso de enseñanza de 19.386 jóvenes.

Más información en la edición de julio de Enfoque.