Testigo vio cómo la piscina de Champlain Towers colapsó un minuto antes del edificio

Una testigo y sobreviviente del derrumbe de Champlain Towers, en Miami, Florida, EE.UU., indicó que hubo algo que le alertó a salir del edificio antes de que este colapsara.
Redacción Vistazo
La zona de la piscina sería la primera en derrumbarse.

Una nueva declaración de un testigo ocular del desastre de Champlain Towers, en South Surfside, podría ofrecer una luz extra para contemplar cuáles fueron las causas del derrumbe del complejo de apartamentos. De acuerdo al Washington Post, minutos antes de que el complejo sucumbiera, los vecinos notaron que la piscina y una parte del estacionamiento se habían derrumbado.

Más de una docena de expertos han coincidido en que los fallos se originaron en la base del edificio. En las fotos de los escombros se evidencia cómo las losas que formaban los pisos se desprendieron completamente de las estructuras verticales que las sostenían. Sin embargo, también hay varios ingenieros han indicado que no creen que las fallas de la base hayan podido generar un desastre de tal magnitud.

El ingeniero veterano Allyn Kilsheimer fue uno de los que le dijo al Washington Post que este daño podría haber sido ocasionado desde la base y llevar consigo un desastre peor.

Existe la posibilidad de que una parte de la [zona] de la piscina se viniera abajo primero y luego arrastrara con ella la parte central del edificio, y eso hizo que se derrumbara. Y luego, una vez que la parte central del edificio se derrumbó, número dos, entonces el resto del edificio no supo mantenerse en pie y se derrumbó también, número tres”, dijo Kilsheimer.

Es precisamente esta teoría la que fue corroborada por una vecina.

DERRUMBE PREVIO

Una residente de Champlain Towers, Sara Nir, le dijo al Post que a la 1 de la mañana del día del desastre escuchó fuertes ruidos de golpes afuera de su departamento. Más tarde, oyó cómo se derrumbaba un muro y salió de su departamento hacia la planta baja del edificio para quejarse con uno de los guardias de la entrada.

La mujer calculó un minuto hasta que, desde el vestíbulo, oyó un gran estruendo y vio que el estacionamiento y la parte cubierta de la piscina colapsaron sobre el estacionamiento subterráneo. Inmediatamente ella y sus dos hijos salieron corriendo del edificio. Llamaron al 911 a la 1:19 de la mañana y un minuto más tarde, personal del Cuerpo de Bomberos y Rescate de Miami – Dade pidió que un grupo respondiera a una alarma en el edificio.

El derrumbe tuvo lugar entre la 1:24 y la 1:25; mientras el carro de bomberos llegaba al lugar.

El edificio se derrumbó el pasado 24 de junio.

LAS TEORÍAS

El único video del derrumbe lo grabó una cámara de seguridad de una propiedad cercana. Lo que llamó la atención de los ingenieros es que la parte exterior de los departamentos superiores parecía estar en buen estado cuando inició el derrumbe.

Kit Miyamoto, presidente de la comisión de seguridad sísmica de California, indicó que aquello es una muestra de que “el fallo vino de abajo”. El experto dijo que pudo haberse dado una “implosión vertical”, que se ayudó de las deterioradas columnas del edificio para llegar a la parte superior.

Aparentemente las columnas pudieron haber sufrido demasiada tensión por compresión o un fallo de cizallamiento por perforación, que se da cuando una losa de hormigón que conecta con una columna se rompe por la presión y cae. La columna perforaría la losa y podría provocar una cadena de derrumbes a medida que el peso se acumula desde arriba.

Según el director de Collaborative Reporting for Safer Structures-U.S., Glenn Bell, el video ofrece una pista importante para centrarse en la zona específica de la estructura donde pudo haberse ocasionado realmente el daño.

Como después se ve que una segunda parte del edifico se derrumba, el profesor de ingeniería estructural de la Universidad de California en Berkeley, Jack Moehle, cree que la primera sección “arrastró la parte restante hacia los lados hasta que se agotó su capacidad de carga gravitatoria y también se derrumbó”.

El presidente de la Asociación Nacional de Demolición, Scott Homrich, también piensa que el segundo derrumbe no fue por una falla, sino producto de medio arrastre y amontonamiento de los escombros contra las columnas.

La zona de la piscina fue especialmente problemática, pues el informe de daños elaborado en 2018 indicaba que la inclinación de la piscina no era suficiente como para drenar el agua y que la construcción necesitaría una serie de costosas reparaciones al llegar a los 40 años. Al momento del derrumbe los moradores sabían las condiciones del edificio, pero las reparaciones estaban programadas para empezar el 1 de julio.

La piscina y el estacionamiento superior colapsaron.

No obstante, la profesora de ingeniería de la Universidad de Nueva Orleans, Norma Jean Mattei, aseguró que el colapso de la piscina no parece ser algo importante o un indicador de que todo el edificio se podría venir abajo.

Por lo que veo, no parecía algo que dijera: ‘Saquen a la gente’. El deterioro jugó un papel, pero no fue lo que causó esta falla. Algo más tuvo que empujar a este edificio por encima”, explicó.

Otra falla que se suma es que un estudio académico reveló que el edificio parecía haberse hundido en 1990, pese a que los pilotes eran adecuados para el suelo arenoso de la zona, según los expertos.

Sin embargo, los expertos entrevistados por The Post argumentaron que es posible que se descubran materiales de baja calidad o mano de obra deficiente en la construcción del edificio, que se realizó entre 1979 y 1981.

Las investigaciones podrían durar alrededor de seis meses.