El drama de los 5 decanos despedidos de Yachay Tech sigue. Tras su separación el pasado 20 de junio, a Hizakazu Minakata, quien era Subdecano de la facultad de Ciencias Físicas y Nanotecnología, le notificaron que tenía una semana para desalojar la vivienda que le había sido asignada en el campus.
“Estuve de viaje, el lunes 26 llegué y me dijeron que tenía hasta el fin de semana para desalojar, mi esposa y yo trabajamos mucho para empacar. Un amigo nos acogió en su casa”, dice el físico japonés de 70 años, quien planea volver a Tokio a fin de mes. “Obviamente no nos sentimos bien por este trato”.
Otro de los decanos separados de la institución es el venezolano Vladimiro Mujíca, ex Decano de Ciencias Químicas e ingeniería.
Mujíca y el actual rector Castillo Chávez son colegas en la Universidad del Estado de Arizona, hasta donde han llegado detalles de los enfrentamientos internos en Yachay Tech por e-mails dirigidos a autoridades académicas.
La situación también es incierta para Paul Baker, quien era Decano de Ciencias Geológicas y para su esposa la ex canciller de la universidad, Catherine Rigsby. Después de su despido, Baker permaneció en contacto con el subalterno que lo reemplazó en el decanato, y en un correo cuestionó su capacidad para ocupar su puesto.
En reacción a esto, el rector de Yachay Tech Carlos Castillo-Chávez le envió una carta a Baker, por medio de la asesora legal de la universidad María de Lourdes Miranda. En la carta el rector le advierte que está “interfiriendo en las decisiones tomadas en esta Universidad, no sólo cuestionando las mismas sino con claro ánimo de intervenir de manera negativa”.
El rector continúa: “Todo acto de intromisión en la gestión que provoque o pretenda causar detrimento a los intereses de la Universidad no es aceptable ni tolerable por ningún motivo, más aún si proviene de una persona que ya no forma parte de la Universidad. Esta es una política de la Universidad y del mismo Estado Ecuatoriano, que de forma soberana y a través de las instituciones competentes, se reserva el derecho de cancelación de visa si la persona practica actos de naturaleza distinta a la categoría migratoria otorgada, de conformidad con los artículo 67 y 68 de la Ley Orgánica de Movilidad Humana”.
La categoría migratoria de Baker actualmente es “9 V Profesional”, es una visa de trabajo ilimitada. La ley indica que la visa puede ser cancelada cuando “han desaparecido los hechos que justificaron la concesión de la condición migratoria”.
Un vocero de Cancillería indicó que el Estado es el único que puede cancelar o revocar la visa sólo si es que hay causales claras.
Baker no quiere esperar porque hay un antecedente. Al español Fernando Albericio, que fue despedido como rector de Yachay Tech en 2015, le quitaron la visa de trabajo a los dos días de su separación impidiendo que continúe en el Ecuador trabajando para una universidad privada.
Por eso Paul Baker, afiliado a Duke University y su esposa preparan su regreso a Estados Unidos, apuran la venta de muebles y de su auto en un estado de notable estrés.
“Hemos sido tratados muy mal, somos científicos y hemos sido tratados como basura en Ecuador”.
A la PhD en física Paola Ayala, la única ecuatoriana entre los despedidos, le decepciona que académicos que fueron reclutados para Yachay Tech, a quienes se les hizo una propuesta de trabajo, sean expulsados de forma brusca. “Se supone que somos gente amable”, dice.
Ayala indica no haber recibido respuesta aún de la Secretaría Nacional de Educación Superior Ciencia y Tecnología (Secescyt) sobre el pedido de diálogo que hicieran
las 5 autoridades académicas separadas de Yachay Tech que se ofrecieron a trabajar gratuitamente. “Sólo queríamos contar nuestra versión, hacer una propuesta, no nos han atendido aún”, dice Ayala.
*NOTA DE ACLARACIÓN: Una versión anterior de este artículo indicaba que Vladimiro Mujíca fue hospitalizado debido a complicaciones de salud por su despido, eso es incorrecto. Pedimos disculpas.