La Policía Nacional del Ecuador, en una operación conjunta con las Fuerzas Armadas y en coordinación con el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, asestó un duro golpe al narcotráfico internacional al interceptar una lancha rápida que transportaba 2,1 toneladas de clorhidrato de cocaína.
La operación se llevó a cabo en aguas internacionales, a más de 500 millas náuticas al norte del archipiélago de Galápagos.
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El operativo, denominado Fénix 147, fue ejecutado por la Dirección General de Investigaciones y su unidad especializada en delitos transnacionales.
Gracias al intercambio de información operacional, se logró interceptar la embarcación de bandera ecuatoriana que llevaba 44 sacos de yute con 1.740 paquetes de droga, mientras recorría una ruta marítima utilizada frecuentemente por organizaciones criminales para el transporte de sustancias ilícitas.
"Esta madrugada, el Bloque de Seguridad, en operación coordinada con Homeland Security Investigations de Estados Unidos, incautó 2.1 toneladas de droga y aprehendió 3 sujetos que transportaban las sustancias ilegales en una embarcación en aguas internacionales", destacó el ministro del Interior, Jhon Reimberg.
Durante la intervención fueron detenidos tres ciudadanos ecuatorianos, presuntos responsables del delito de tráfico de sustancias catalogadas sujetas a fiscalización.
Con esta acción, se evitó que 2'180.500 gramos de droga fueran comercializados en el mercado internacional, generando una afectación económica de USD 50 millones para las mafias narcotraficantes.
En Estados Unidos, esta droga habría alcanzado un valor de USD 120 millones, y en Europa, hasta USD 500 millones.
La Policía Nacional calificó esta operación como un golpe contundente contra el crimen organizado y el narcoterrorismo, que contribuye a fortalecer la seguridad y soberanía del país.
El delito de tráfico ilícito de sustancias catalogadas sujetas a fiscalización (a gran escala) está tipificado en el artículo 220, inciso primero, literal d, del Código Orgánico Integral Penal (COIP) y se sanciona con una pena privativa de veintidós a veintiséis años.