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Reportera que vende empanadas respondió a las burlas y se hizo viral en Bolivia

jueves, 15 julio 2021 - 17:52
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Estos días es viral el contundente mensaje que escribió la periodista Karla Villarroel ante las burlas que surgieron porque los fines de semana vende empanadas.

El pasado sábado, la reportera recorrió los exteriores de la Escuela Militar de Ingeniería (EMI), en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, para ofrecer empanadas y sándwiches; aprovechando la gran cantidad de personas que esperaban recibir la vacuna contra el covid-19.

Sin embargo, una de sus amigas le preguntó por WhatsApp: “¿Tan bajo caíste, no te da vergüenza?”. Karla le respondió de manera tajante “vergüenza es robar”. Luego contó su experiencia en Facebook y ahora la publicación recorre todas las redes sociales de Bolivia y el mundo.

“Lo que importa son las ganas de salir adelante, vergüenza es robar, vergüenza es ser mediocre por burlarse de las ganas que tiene una persona de salir adelante buscando ingresos de manera honrada con sacrificio, sin hacerle daño a nadie y sin meterse en la vida de nadie. ¡Eso es una vergüenza!”, reza la publicación de Facebook.

Agregó: “Amo mi trabajo, estoy orgullosa de ser periodista. Pero si hay la posibilidad de hacer algo extra honestamente pues lo hago”.

La reportera le contó al programa ‘Aquí Estoy’, de Radio EL DEBER, que su madre inició la venta de empanadas, pero luego dejó de hacerlas y su hermana tomó la posta para comprarse un nuevo celular.

Karla ayudó a su hermana luego de una cobertura en una institución donde se vacunaban a las personas contra la covid-19.

“Ese día llegué de mi trabajo y para ayudar a mi hermana le dije que vendamos empanadas en la EMI, que está a tres cuadras de mi casa. Entonces ella me pregunta si me daba vergüenza y le dije que no, y que yo haría sándwiches”.

La reportera encontró a varios vecinos y personas que la reconocieron, pero no la intimidaron, al contrario utilizó esto como arma para enganchar a la gente

“A quienes me reconocieron, les pedía que me compren y así vendí todo, hasta los refrescos de canela que hice”, relató a EL DEBER.

Actualmente, la publicación de Karla Villarroel lleva más de cinco mil veces compartida, casi cuatro mil comentarios y miles de reacciones.

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