El grupo yihadista Estado Islámico reivindicó el martes el atentado suicida que dejó 22 muertos, entre ellos dos chicas de 8 y 18 años, y 59 heridos, en un concierto en Mánchester atestado de jóvenes.
El autor del atentado, el más mortífero en suelo británico en doce años, "deliberadamente apuntó a jóvenes inocentes e indefensos", sostuvo el martes la primera ministra británica Theresa May.