¿Por qué no deberíamos hurgarnos la nariz?
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Griffith, en Australia, menciona que hurgarse la nariz puede dañar el interior de las fosas nasales, dejando que las bacterias se filtren en la sangre y viajen con mayor facilidad al cerebro.
La investigación fue realizada en roedores, puesto que su sistema olfativo funciona y está estructurado de forma similar al de los humanos.
Los investigadores analizaron lo que ocurre cuando el nervio que conecta la nariz con el cerebro se expone a la Chlamydia pneumoniae, virus que causa problemas en los senos nasales como la sinusitis o dolores de garganta.
El análisis encontró niveles detectables de la bacteria en el cerebro en 72 horas. Los roedores infectados mostraron daños en las vías neuronales y el desarrollo temprano de Alzheimer en 28 días.
Además, los investigadores se encontraron con la formación de placas de beta amiloide en el cerebro de los roedores, placa que está relacionada con el desarrollo del Alzheimer.
James St. John, autor principal de la investigación afirmó que su equipo tiene que hacer este estudio en humanos y confirmar si funciona de la misma manera.
“Es una investigación que ha sido propuesta por mucha gente, pero que aún no se ha completado. Lo que sí sabemos es que estas mismas bacterias están presentes en los humanos, pero no hemos averiguado cómo llegan a ellas”. mencionó James St. John.
