María José Correia, de 27 años, recibió un balazo que terminó con su vida, tras negarse al robo de su mochila y teléfono celular.
El hecho, ocurrido en la 30 y Venezuela (suburbio de Guayaquil), ha causado consternación entre vecinos y familiares de la joven, quien trabajaba como maestra en una escuela pública.
Según narran testigos, antes de las 6:00 de hoy, lunes 20 de julio, la víctima iba a tomar un bus para transportarse a un laboratorio donde se realizaría exámenes médicos.
En el trayecto fue interceptada por dos sujetos que le pidieron sus pertenencias. Ella se resistió y forcejeó con uno de los delincuentes, mientras el otro -que aguardaba en una moto sin placas- disparó contra su pecho. Los delincuentes huyeron.
La policía armó varias rondas tras el crimen, mientras la Fiscalía recibió la denuncia del esposo de la fallecida.