El único detenido por el caso de
Renato Cardelli, un joven asesinado hace casi un año por no dejarse robar su teléfono celular, podría salir libre en las próximas semanas porque aún no tiene sentencia.
El crimen ocurrió el 10 de junio de 2014. A Cardelli Pérez, de 19 años, lo asesinaron con un disparo en la cabeza. Hoy, su madre Perla Pérez no encuentra consuelo por la pérdida de su único hijo. Lo recuerda con nostalgia a través de fotografías. “Yo no he tenido tiempo para llorar el luto de mi hijo, y lo que veo es como una burla, no he tenido tiempo porque he cooperado minuciosamente en la causa de mi pequeño, pero realmente me quedo asombrada de ver la falta de sensibilidad del ser humano”.
El caso está en una de las salas especializadas de la Corte de Justicia del Guayas, pero
en tres semanas se cumplirá un año sin sentencia para el único detenido acusado como autor del homicidio, Carlos A.F.
El abogado Alejandro Arias, defensor del principal implicado en este asesinato, se negó a dar declaraciones sobre el caso.
La
abogada de la familia de Cardelli, Guissella Padovani, sostuvo que las trabas durante el proceso han impedido que el tema se aclare y se juzgue a los culpables, y agrega que hay otro imputado que permanece prófugo.
La madre de Renato solo espera que este caso sea una bandera para aquellos asesinatos que aún no han sido resueltos. “El caso de mi hijo no se puede quedar impune, como el de muchos niños, el de muchas personas”.
Además de campañas por redes sociales,
amigos y familiares de Renato harán un plantón la próxima semana por todas las víctimas de homicidios en Guayaquil.