Así participó un policía en el robo de 158.000 dólares, que custodiaba dentro de un centro de acopio en Durán
Un policía que cumplía funciones de encargado en el Centro de Acopio de Indicios y Evidencias de la Policía Judicial en Durán es condenado por el robo de 158.000 dólares y cuatro teléfonos celulares.
En diciembre de 2017, tras la denuncia presentada por la Policía Nacional, Fiscalía inició una investigación por el hurto de dinero y otros bienes.
Según la denuncia, existía un faltante de 158.000 dólares y varios teléfonos celulares de alta gama, recayendo las responsabilidades en el policía Marco Julio O. T., quien desempeñaba las funciones de custodio al interior de dichas bodegas.
El ahora sentenciado, luego de la desaparición del dinero y de los celulares, solicitó veintidós días de vacaciones, que utilizó para su beneficio. Una vez concluidas las mismas, desapareció y no justificó su inasistencia a las labores que desempeñaba.
En la audiencia de juzgamiento, desarrollada la tarde y noche de este martes –y luego de más de cinco reinstalaciones contadas desde 2022– en la Unidad Judicial Multicompetente de Durán, la fiscal Cecilia Rodríguez Arboleda presentó como pruebas: los partes de aprehensión e investigativos, tanto de la Policía Judicial como de Asuntos Internos de la Policía Nacional; los informes de evidencias encontradas en las auditorías internas (faltantes del dinero y celulares), el informe de reconocimiento de lugar de los hechos, entre otros.
A esto se sumaron los testimonios de diecisiete personas, incluidos agentes investigadores, peritos y policías que hicieron la entrega de bienes al ahora sentenciado, en la fecha que se suscitaron los hechos.
La acusación particular por parte de la Policía Nacional estuvo representada por el coronel Ángel Esquivel Moscoso.
Los jueces del Tribunal Penal, conformado por Manuel Armas, Martha Gavilánez y Abraham Cheing, acogieron las pruebas presentadas por Fiscalía y –por unanimidad– emitieron la sentencia de dos años de prisión contra el exagente policial Marco Julio O. T., además de imponerle una multa de doce salarios básicos de remuneración (5.400 dólares) y el pago de 158.000 dólares como reparación integral a la Policía Nacional (como afectada).
También le dispusieron emitir disculpas públicas a la institución policial, bajo los parámetros que serán dados a conocer una vez que se notifique la sentencia por escrito a las partes procesales.
Fiscalía procesó este caso con base en el artículo 198 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que sanciona el delito de hurto de lo requisado con un máximo de dos años de prisión.
