Indígenas de Cotacachi amenazaron a los habitantes de la ciudad de Ibarra, en la provincia de Imbabura, con tomarse la ciudad y destruirla si es que el Gobierno no escucha sus exigencias.
La tarde de este miércoles ocho de octubre del 2025, miles de indígenas del cantón Cotacachi se movilizaron en camionetas e incluso volquetas, algunas de las cuales tenían tapadas sus placas, rumbo a la ‘Ciudad Blanca’.
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Los manifestantes llegaron hasta el parque principal de Ibarra y recorrieron varias calles, ya que su intención era protestar en la Gobernación de Imbabura, ubicada en el centro de la ciudad.
Sin embargo, se encontraron con un amplio contingente militar y vallas, que impidieron su paso. Los indígenas se quedaron en el Obelisco y desde ahí varios integrantes de la Unión de Organizaciones Campesinas Indígenas de Cotacachi (UNORCAC) lanzaron amenazas contra los ibarreños.
Otro individuo, en cambio, manifestó: “Primer aviso a la ciudad de Ibarra: compañeros de Ibarra si no ayudan a la comunidad, a los indígenas, a los pueblos, en la segunda venimos a desbaratar”.
Mientras que una mujer indígena recalcó que si no les hacen caso llegarán con más gente para tomarse la ciudad.
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La provincia de Imbabura ha sido la más afectada por el paro convocado por la Conaie, que exige la derogación del decreto que eliminó el subsidio al diésel y la liberación de los 12 indígenas detenidos en Otavalo, entre otras peticiones.
Para lograr que el Gobierno escuche sus pedidos, los indígenas han cerrado múltiples vías de acceso a los cantones de Ibarra, Otavalo, Antonio Ante y Urcuquí; lo cual ha causado pérdidas millonarias y desabastecimiento.
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Además, los indígenas han trastocado la vida cotidiana de los habitantes de esta provincia. En la red social TikTok varios usuarios narran las peripecias que deben pasar para llegar a sus casas: algunos caminan largos tramos o usan bicicleta, pero los manifestantes les ponchan las llantas.
Mientras tanto, la Policía ha desplazado alrededor de 800 efectivos en toda la provincia, pero las carreteras siguen bloqueadas a puertas de un feriado.