Una madre es acusada de haber agredido a su hijo de 8 años, causándole graves lesiones. La causa de la agresión sería que el menor de edad habría sustraído 30 centavos de la cartera de su progenitora.
La Policía se enteró del caso cuando una de las maestras de la escuela del niño se percató de las lesiones.
El menor presenta marcas en la espalda, boca, brazos, piernas y también llagas por quemadura en una de sus manos. El agredido recibió atención médica en una casa de salud, donde fue evaluado y enviado a descansar 4 días.
Frente al delito flagrante, la Policía fue a buscar a la acusada a su lugar de trabajo y domicilio, pero al parecer la mujer huyó. Mediante una llamada telefónica habría mencionado que le entreguen al niño a su padre.