"Tanta libertad como sea posible, tantas restricciones como sean necesarias". Bajo ese lema ha comenzado hoy lo que el Gobierno austríaco define como el primer paso hacia "una nueva normalidad", con la apertura de miles de tiendas gracias a la buena marcha del número de contagiados y recuperados del coronavirus.
"Tanto el número de nuevas infecciones como de hospitalizaciones van en la buena dirección", explicó el canciller austríaco, el conservador Sebastian Kurz, en una rueda de prensa en la que recordó que a partir de hoy pueden abrir las tiendas de menos de 400 metros cuadrados y todos los comercios dedicados a bricolaje y jardinería.
También pueden funcionar talleres y túneles de lavado, pero no peluquerías o gimnasios, ni establecimientos de hostelería.
Desde el pasado 16 de marzo, sólo abrían en Austria los comercios que ofrecen productos de primera necesidad.
Disciplina y firmeza
Kurz agradeció la "disciplina" y "firmeza" de los ciudadanos en el cumplimiento de las medidas de aislamiento y restricción de movimientos dictadas hace cuatro semanas.
"Podemos aplicar el primer paso hacia una nueva normalidad", indicó el canciller, en referencia a una relajación escalonada de las medidas de contención del virus mientras se mantiene la reducción del contacto social, la restricción de movimiento y el uso obligatorio de mascarillas en espacios públicos.
Freno de emergencia
"Nuestra actitud los próximos meses será muy clara: Tanta libertad como sea posible y tantas restricciones como sean necesarias", resumió.
"Si los datos evolucionan en la dirección equivocada, echaremos el freno de emergencia", advirtió el canciller.
Kurz anunció de que durante esta semana se anunciarán novedades sobre las actual prohibición de celebrar eventos deportivos y culturales, y recordó que la decisión sobre si los colegios siguen cerrados más allá de mediados de mayo se tomará a final de este mes.
Colas en comercios
La apertura de comercios se ha notado hoy especialmente en las grandes superficies de bricolaje y jardinería, donde en algunos casos se han formado colas debido a las limitaciones de ocupación dictadas, aunque sin grandes problemas.
En las zonas comerciales de Viena, el movimiento de personas seguía hoy siendo bastante limitado.
Esperando aumento de casos
Rudolf Anschober, el ministro de Sanidad, del partido Los Verdes, indicó que espera un cierto aumento de las infecciones tras esta apertura de hoy, pero confió en que las medidas de distanciamiento y el uso de máscaras permita mantener al virus bajo control.
Anschober destacó que desde hace diez días la tasa de nuevos infectados es menor al 3 % diario.
De los 14.135 positivos detectados hasta ahora, 7.633 se consideran ya curados frente a los 6.118 aún enfermos, de los cuales sólo 1.000 están hospitalizados.
La COVID-19 ha acabado en Austria con la vida de 394 personas.