Por: Patricia Estupiñán
Leonidas Iza en su libro Estallido confirma que su pensamiento es dogmático. La obra es un reprise de las tesis del comunismo soviético sobre el capitalismo, que murieron con la caída del Muro de Berlín.
Al enterarse algunos seguidores de Leonidas Iza, que la librería quiteña Rayuela vendería junto al libro "Estallido" el de la ministra de Gobierno María Paula Romo, titulado "Octubre", llamaron a un boicot en ese centro cultural. Un signo grave de intolerancia. Parece que para los seguidores de Iza, sobre los eventos de octubre, los ecuatorianos solo debemos considerar su versión. Sin embargo, no hay nada más saludable para una sociedad que tener todas las versiones posibles de un acontecimiento polémico para llegar a la verdad.
El libro "Estallido" confirma el pensamiento dogmático de su autor. La obra es un reprise de las tesis del comunismo soviético. Dos personajes suelen ser citados con frecuencia: Rosa de Luxemburgo y Vladimir Lenin, para argumentar contra el capitalismo. Su visión es maniquea y algunos de sus argumentos no tienen sustento. En el capitalismo según Iza, las crisis económicas ocurren por “la caída de la tasa de ganancia de las clases dominantes, cuando el lucro es menor al que aspiran”. Conviene preguntarle al autor de Estallido, en la actual crisis económica por la pandemia, ¿qué pérdida de ganancias la originó?
Otros argumentos de su concepción de la economía son sacados de la Teoría Dependencia surgida en la Cepal, según la cual el subdesarrollo económico se debe a la diferencia en el intercambio comercial de las materias primas que producen los países subdesarrollados y los bienes manufacturados de los países desarrollados. ¿No tienen más alto ingreso per-cápita que algunos países industrializados, ciertos países árabes productores de petróleo? ¿No son desarrollados países agrícolas, como Nueva Zelanda? El dogma contra el capitalismo, tan aclamado por el autor del libro "Estallido", fue derrotado con la caída del Muro de Berlín. Países que libraron guerras para convertirse en comunistas como Vietnam y China dejaron de abominar la iniciativa privada, porque solo la libertad económica del capitalismo permite a millones de personas abandonar la pobreza. La tesis de la Teoría de la Dependencia también ha sido superada. Brasil y México producen muchísimos bienes manufacturados y todavía no pueden ser considerados países desarrollados.
Finalmente, lo más grave en este libro es la justificación de la violencia. “La violencia”, escribe: “Es un fenómeno histórico que canaliza una voz que la naturaleza de las instituciones de la democracia restrictiva está incapacitada de absorber”. Con ello parece acercarse a las raíces de Sendero Luminoso en Perú, movimiento que significó más de una década de dolor y sangre en el vecino país, donde murieron 70 mil, la mayoría de ellos de ancestro indígena. Al narrar los hechos de octubre, Iza justifica los secuestros en el Ágora de la Casa de la Cultura, en comunidades indígenas, las agresiones a policías mujeres, a periodistas, a militares y describe como crímenes a las acciones para evitar más daños por parte de las Fuerzas del orden.
Uno de los derechos de la democracia es la libertad de expresión, que permite difundir hasta ideas de en extremo dogmáticas e intolerantes. Sin embargo, uno de los deberes es aplicar la ley, cuando las palabras de intolerancia y falta de respeto a los derechos de los demás se convierten en hechos. Como en el libro "Estallido" hay narración de delitos, a confesión de parte, relevo de pruebas.
