Úrsula Strenge revela detalles sobre la condición de su hija: 'Todo lo que podía pasar, pasó'
Lo que comenzó como un aparente malestar menor terminó desencadenando múltiples complicaciones neurológicas que han puesto a prueba a toda la familia.
La vida de Úrsula Strenge dio un giro inesperado en noviembre de 2024. Ese día, en lugar de celebrar el cumpleaños de su hija mayor, Camila Nogales, la presentadora de televisión se encontraba a su lado en una clínica, iniciando lo que sería un complejo y doloroso proceso médico que, hasta hoy, continúa en medio de la incertidumbre.
Durante meses, Strenge mantuvo en reserva el diagnóstico de su hija. Sin embargo, con el paso del tiempo decidió compartir su testimonio. Este 1 de julio, en una emotiva entrevista transmitida en el programa 'En Contacto', relató con detalle los momentos más difíciles que ha vivido junto a su familia desde aquel día en noviembre.
Según contó, todo empezó con síntomas que parecían menores. “Antes de irse de viaje a Quito, Camilita empezó a sentir que se le dormían los pies, pero en el chequeo todo salió perfecto”, recuerda. Días después, apareció un dolor de cabeza persistente. En la universidad, los médicos lo atribuyeron a una contractura en cuello y hombros. La recomendación: hacer algunas terapias. “Ahí se perdieron unos días valiosos”, lamentó.
Pero el dolor no cedía, y el mismo día del cumpleaños de Camila, Strenge insistió en que fuera a una clínica. Allí le realizaron una tomografía que reveló lo impensable: una cadena de trombos en el cerebro. Lo que parecía una intervención delicada, pero controlable, se complicó rápidamente. Tras una primera aspiración de los trombos, el sistema autoinmune de Camila reaccionó de forma agresiva, elevando su presión intracraneal.
La joven fue sedada para intentar controlar el proceso inflamatorio, pero la situación se agravó. Una hemorragia cerebral, seguida de un infarto y una serie de complicaciones severas, incluyendo una infección del sistema nervioso central y neumonía, pusieron su vida al límite. Fue sometida a múltiples operaciones, incluyendo una craneotomía, y su cuerpo incluso rechazó la prótesis colocada en su cráneo. “Todo lo que tenía mínima probabilidad de pasar, le pasó a ella”, dijo Strenge.
Aunque el pronóstico sigue siendo reservado, Strenge asegura que Camila está conectada a la vida. “Obviamente se frustra, se pone triste. Ella no lo puede decir con palabras, pero yo conozco a mi hija. La vida de Camila es un milagro”.