¿Cuál es el mejor momento del día para tomar café? La explicación a esa pregunta guarda relación con un concepto muy interesante, pero poco conocido: la cronofarmacología.
Cronofarmacología es la disciplina que analiza la interacción entre los distintos
ritmos biológicos del cuerpo humano y los fármacos.
El organismo cuenta con varias referencias temporales para guiar las necesidades o los estímulos a lo largo de las 24 horas: el ritmo circadiano determina los hábitos de sueño, el ritmo ultradiano es el que pide descansar cada 90 minutos y el
ritmo del cortisol, tristemente conocida como la “hormona del estrés”, es el encargado de regular el nivel de alerta. Miller considera que la cafeína, el principio activo del café, debe ser incorporada teniendo en cuenta esos relojes internos para generar un efecto positivo que no de lugar a trastornos o desbarajustes.
Un estudio de la Universidad de Sheffield demuestra que el
mayor nivel de cortisol se da entre las 08h00 y las 09h00.
Existen otros momentos en los que el cuerpo retoma esta alerta natural a lo largo del día. En general, los niveles de cortisol marcan incrementos a las 13h00 y entre las 17h30 y las 18h30. Por ello, lo que el especialista en neurociencia, Steven Miller, el cerebro detrás del blog Neuroscience DC, recomienda es tomar el
primer café hacia las 10h00 u 11h00.