Buenas perspectivas impulsan inversiones en el sector hotelero
La normalización de los vuelos comerciales, la relajación parcial de las medidas sanitarias y la masiva vacunación contra el COVID-19 fueron los principales factores que permitieron una leve recuperación del sector hotelero ecuatoriano, uno de los más afectados desde el inicio de la pandemia.
Según datos del Banco Central del Ecuador, la actividad de alojamiento y servicios de comida registró un Producto Interno Bruto de 1.893 millones de dólares en 2020, lo cual representó una caída del 21 por ciento en comparación con el 2019.
Aún no hay cifras definitivas del año pasado, pero sin duda que el 2021 fue un mejor año, reconoce Severo Barrera, gerente operativo de Hotel IBIS Quito. Especialmente, por el dinamismo de los turistas nacionales.
Sin embargo, no se llega a los niveles de ocupación de antes de la pandemia, debido a que falta una mayor actividad de los visitantes extranjeros, lo cual se agravó con la aparición de las variantes delta y ómicron.
Las expectativas son más positivas para el presente año, ya que aparentemente los picos de contagios del COVID-19 ya pasaron. “Esto dará mayor confianza a los viajeros de placer y de negocios para desplazarse”, asegura Barrera.
Además, se prevé una recuperación del turismo internacional y del segmento de eventos y convenciones, que es un dinamizador de los viajes.
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Este alentador futuro ha impedido el estancamiento del sector hotelero ecuatoriano, que registra importantes inversiones para nuevos establecimientos, algunos que ya están operando y otros a punto de iniciar su edificación.
En el cantón General Villamil Playas, por ejemplo, en los siguientes meses se licitará la construcción del Courtyard by Marriott Resort, que tendrá 100 habitaciones, salones de eventos, áreas de recreación y demás amenidades.
Los trabajos de construcción tomarán 24 meses y demandará una inversión de 13 millones de dólares. “La cual será posible llevarla a cabo gracias al soporte de líneas de crédito bancarias que confían en nuestro proyecto”, manifiesta José Hidalgo, gerente general INNOVUM, promotora inmobiliaria a cargo de la iniciativa y que pertenece al Grupo ALESSA.
El proyecto no solo ayudará al turismo, sino que impactará positivamente a la economía del cantón, con la generación de 500 empleos durante la ejecución de la obra y 100 plazas de trabajo adicionales cuando abra sus puertas.
A ello se suman, miles de fuentes de empleo indirecto a través de toda la cadena de suministros de productos y servicios que el hotel demandará para su operación.
“Los indicadores prevén una recuperación importante del sector del turismo en los siguientes cinco años, esto sumado a las iniciativas públicas y privadas que se llevan a cabo; por ello, estamos convencidos que para el año 2024 y en adelante, contaremos con una demanda importante de turistas para el Courtyard by Marriott”, explica Juan Xavier Sánchez, vicepresidente de Grupo ALESSA.
Algo distintivo de estas nuevas inversiones hoteleras es que no son exclusivas de Guayaquil y Quito. Tal es el caso de The View Hotel, ubicado en el cantón Cumandá, provincia de Chimborazo.
El establecimiento, que abrió sus puertas en enero del presente año, cuenta con 22 habitaciones (entre estándar, matrimoniales y familiares); y una suite presidencial, así como salón de eventos para 120 personas, gimnasio, piscina, bar y restaurante.
Para ello se realizó una inversión de dos millones de dólares, que también tiene por objetivo potenciar la economía y el turismo en Cumandá y en el cantón vecino, Bucay. Así, de los 18 colaboradores del hotel, el 75 por ciento son oriundos de la zona.
“Incluimos a nuestros habitantes al proyecto donde cada asociación ofrezca su atractivo turístico, productos elaborados artesanalmente, recorrido en caballos, visita de cascadas, trapiches, queseras y es por eso que también hemos invertido en cuatro cuadrones donde nuestros huéspedes podrán explorar todos estos lugares”, explica Daniela Ibarra, gerente general de The View Hotel.
Estas alianzas estratégicas con los gremios turísticos, empresas privadas y emprendimientos locales hacen prever un crecimiento importante del número de visitantes.
“Anteriormente la ausencia de un hotel de categoría en la localidad, no daba paso a que la afluencia de turistas nacionales y extranjeros crezca, sin embargo, ahora el The View Hotel cubre las necesidades de ejecutivos y turistas”, resalta Ibarra.
En Machala y Latacunga, la cadena hotelera Oro Verde inauguró sus nuevos hoteles bajo la marca Select Service REEC, que se distingue por un servicio de alta calidad.
El plan de expansión de la cadena contempla tener 15 establecimientos en el país hasta el 2025 (actualmente son 11), para lo cual se prevé una inversión de 20 millones de dólares.
En cambio, en la provincia de Napo, el Grupo Selina tiene prevista la reapertura de su hotel ubicado en Tena, que bordea una inversión de 500.000 dólares.
Una decisión basada en la solicitud de sus clientes que ven en esta infraestructura una solución de alojamiento a tres horas de Quito, que brinda una experiencia amazónica, confort de spa a orillas del río y alimentación.
Ante el positivo panorama del sector, las cadenas hoteleras se preparan para reforzar sus recursos operativos y humanos a fin de atender la nueva demanda. Paralelamente, analizan sus proyectos de expansión.
Severo Barrera, de Hotel IBIS Quito, asegura que la marca analiza la factibilidad de retomar sus proyectos de construcción en las principales ciudades del país, iniciando desde Guayaquil.
