Francesca Manno, de 83 años, murió aplastada cuando cruzaba el patio de su edificio mientras un vecino de 70 años caía desde 20 metros de altura tras intentar quitarse la vida.
Los disparos efectuados durante el ataque armado ocasionaron que el funcionario perdiera el control del vehículo y se impactara contra un muro cercano.
Un hombre murió a metros de la puerta de su casa después de que su vecino le disparó catorce veces al ser atacado en medio de una discusión por una llave de agua.