La nutrición infantil: el rol protagonista de la leche materna y las innovaciones en sustitutos adecuados

La leche materna es insuperable, pero cuando se dificulta la lactancia, encontrar un sustituto adecuado es esencial. Un experto nos habla sobre los beneficios de amamantar y los descubrimientos que han mejorado las fórmulas infantiles.

Foto una mamá cargando a su bebé en etapa de lactancia.
Nadia Zamora Freire

La desnutrición infantil sigue siendo un reto significativo en Latinoamérica, incluyendo países como Ecuador. Combatirla comienza con el foco en la alimentación desde los primeros días de vida.

En este artículo, exploramos la importancia crucial de la nutrición temprana, la relevancia de la lactancia materna y las últimas innovaciones en fórmulas infantiles, de la mano del doctor Rodrigo Vázquez Frías, gastroenterólogo y nutriólogo pediatra del Hospital Infantil de México Federico Gómez.

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Madre dando de lactar a su bebé. La lactancia materna exclusiva es lo que más se recomienda para el desarrollo idóneo del pequeño.

El oro líquido: La leche materna

El doctor Vázquez es enfático: la leche materna es la principal fuente de alimentación y debe ser el pilar de la nutrición infantil, pues esta "cumple con todos los requerimientos de macro y de micronutrimentos que requiere cualquier niño”.

El experto refuerza la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de dar lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, y complementada hasta, al menos, los 24 meses.

La leche humana no solo es una fuente de nutrición completa, sino que también alberga una microbiota (microorganismos benéficos) y componentes funcionales, como los Oligosacáridos de la Leche Materna (HMOs), que nutren la microbiota intestinal del bebé, fortalecen su sistema inmunológico y apoyan su desarrollo neurológico, señala este experto que además es Presidente de la Sociedad Latinoamericana de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (LASPGHAN).

Aunque el especialista promueve los beneficios de la leche materna, reconoce que es necesaria la innovación en las fórmulas sustitutas, pues estas son salvavidas cuando la lactancia no es viable por diferentes factores como: infecciones o enfermedades que la mamá padece, galactosemia (trastorno metabólico en el organismo del bebé), baja producción de leche, entre otros.

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Los riesgos de usar sustitutos inadecuados

El especialista comenta que, lamentablemente, no todos los niños reciben leche materna de forma exclusiva o total, es allí cuando se recurre a las fórmulas, pero pueden darse problemas cuando se recurre a sustitutos inadecuados, y los riesgos pueden ser: el alto contenido de proteínas (tres veces mayor que la leche humana en el caso de la leche de vaca), caseínas que pueden causar microsangrados intestinales, además de una incorrecta absorción de hierro.

Otros situaciones que vienen relacionadas a elegir leches sustitutas inadecuadas es el riesgo a desarrollar sobrepeso y obesidad desde etapas tempranas, lo que conlleva riesgos de salud a largo plazo como la hipertensión y la diabetes.

Un sustituto adecuado es aquel que cumple con las características estipuladas por los códigos alimentarios y busca minimizar estos riesgos, señala el especialista, quien destaca que la ciencia ha trabajado durante décadas para que los sustitutos adecuados puedan acercarse lo más posible a los beneficios funcionales de la leche materna.

Bebé tomando su biberon de leche de fórmula. La leche sustituta a la leche materna se da en casos en que la lactancia materna no es viable.

El papel clave de los HMOs y probióticos en las fórmulas infantiles

La última gran innovación se centra en la microbiota intestinal del bebé, que es esencial para el desarrollo inmunológico y neurológico. El objetivo es que la fórmula infantil ejerza efectos muy parecidos a los de la leche materna sobre esta microbiota, comenta el experto, quien estuvo dando una charla en Guayaquil.

La innovación de punta en fórmulas infantiles consiste en la adición sinérgica de:

"De forma natural la leche materna tiene prebióticos y probióticos. Lo que se está haciendo es adicionarle estos prebióticos y probióticos a este sustituto con el objetivo de que pueda tener resultados mucho más parecidos”, explica el doctor Vázquez.

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No se puede replicar la leche materna

Las innovaciones actuales en el mercado se colocan a la vanguardia al integrar una diversidad de HMOs y cepas probióticas que trabajan en conjunto, logrando un efecto sinérgico para acercarse a los beneficios de la leche materna, pero esto eso solo la búsqueda de un sustituto adecuado.

Ana Cristina Valencia, directora de Nestlé Nutrición en Ecuador, destaca que la inversión en investigación es una misión constante de la compañía y señala: "Replicarla (la leche materna) y tener exactamente lo mismo va a ser muy difícil, pero también es el rol de empresas como la nuestra de avanzar en el en el paso de investigar, de invertir en estudios clínicos para ofrecer lo mejor posible a la población en sus distintas necesidades".

El mensaje final del especialista es claro: la lactancia materna es una situación compleja con aristas socioeconómicas y geopolíticas, y todos debemos hacer lo posible por favorecerla y preservarla. No obstante, en los casos en que no pueda lograrse de forma parcial o total, es crucial ofrecer las mejores opciones para favorecer el crecimiento, desarrollo neurológico e inmunológico del infante.