Lori Beiswenger se dio cuenta que su perro estaba siendo atacado cuando escuchó su ladrido, al que describe como
"el peor y más aterrador grito que ha llegado a mis oídos".
Ella vio que su perro,
Hope, estaba en el lago de un campo de golf, en Florida (EE.UU.), y luchaba contra un
cocodrilo de 2,2 metros de largo. "Seguí gritando, pidiendo ayuda, pero nadie venía. Así que decidí entrar al agua", relató Beiswenger.
La mujer
haló la cola del reptil para intentar forzarlo a soltar a su perro, que permanecía entre las mandíbulas del cocodrilo, chillando.
Finalmente un hombre que pasaba escuchó el alboroto y con una pala golpeó al animal y ayudó a Beiswenger a sacarlo del agua, y con él, al perro,
atrapado entre los dientes del cocodrilo.
Hope tenía la pata delantera casi desprendida y tuvo que someterse a tres horas de cirugía para salvarle la vida.
En cuanto al cocodrilo, en un video que se grabó después del ataque, se puede ver al hombre atándole las
patas para inmovilizarlo, reportó CNN Español.