Dicen que el matrimonio es un día inolvidable, pues dos vidas están a punto de unirse con el propósito de que ese enlace dure para siempre. Para Lorena Rodríguez, una ciudadana colombiana, ese momento mágico terminó convirtiéndose en una pesadilla, pues en medio de su celebración llegó uno de los invitados más indeseables de los últimos tiempos: el coronavirus.
La covid-19 previamente había retrasado los planes de boda de Lorena y su novio, tienes planeaban celebrarla en marzo del 2020. Sin embargo, la emergencia sanitaria y el miedo al coronavirus aplazaron la ceremonia un año, por lo que terminó llevándose a cabo el pasado 20 de marzo.
Con todos los protocolos establecidos por la autoridad sanitaria del país, como el uso de tapabocas o mascarillas y el distanciamiento social, el evento se realizó con relativa calma, hasta cuando los invitados llegaron al salón de eventos donde se realizó la recepción. En el lugar gran parte de los 50 asistentes, quizá motivados por el entusiasmo del momento o la sensación de seguridad, de estar entre familiares, relajaron las medidas. Se sacaron las mascarillas y algunos incluso se abrazaron.
De acuerdo con el diario El Tiempo, entre los invitados había personas procedentes de Barranquilla, pero la mayoría eran de Cali. El problema fue que una, o varias personas, eran portadores del virus sin saberlo y fueron causantes de un contagio masivo.
Después de la ceremonia 15 personas presentaron los síntomas distintivos de la covid-19 y tras hacerse las pruebas correspondientes, se confirmó la infección. Los padres de Lorena, la novia, fueron de los más infectados por el virus. La pareja fue internada en la unidad de cuidados intensivos (UCI) de la clínica Versalles, en Cali, donde aún permanecen hospitalizados.
Mientras que el padre de Lorena ha permanecido 20 días en la UCI, con soporte de oxígeno, la madre de la mujer solo estuvo 12 días intubada antes de pasar a una sala de observación.
"Sentí que me quería morir, que esto no estaba pasando. Es algo que no le deseo a nadie en el mundo, a nadie, a nadie. Cuídense, cuiden a su familia. No hagan ceremonias, no hagan ninguna fiesta, reuniones familiares (...). Esto es algo que duele en el corazón, yo nunca me imaginé ver a mis papás en esta situación y verlos así es lo peor", afirmó Lorena.
Constantemente Lorena y su hermano Carlos agradecen al personal sanitario por cuidar de sus padres y acotaron que esta situación les ha servido para aconsejar a sus amigos, conocidos y otros familiares sobre la importancia de respetar las medidas de bioseguridad, el cubrebocas, distanciamiento y no bajar la guardia ni siquiera en el propio hogar.
Nadie sabe, después de todo, dónde está el virus.
El coordinador urgencias de la Clínica Versalles, el doctor Jorge Revelo, indicó que parte de que podamos seguir viviendo nuestra vida en esta nueva normalidad es acatar las medidas de protección.
“No por llegar a casa estamos a salvo; por el contrario, nosotros debemos continuar cuidándonos en la casa, cuando vamos a donde nuestra mamá o recibimos alguna visita. El tapabocas y el lavado de manos es hoy probablemente la única medida que tenemos para evitar contagiarnos”, expresó el médico.
Hasta el momento Colombia ha reportado 2.8 millones de casos de covid-19 y más de 72 mil muertes, según las cifras de la Universidad John Hopkins. El país se encuentra pasando una dura crisis, con hospitales saturados y más de 400 muertes diarias por coronavirus.