Después de varios años, sale a la luz una parte de la historia que vivió Britney Spears cuando tuvo problemas psiquiátricos y de droga.
El exmanager de la cantante, Sam Lutfi, la demandó porque asegura que aún le debe dinero del tiempo que estuvieron trabajando juntos. Según documentos judiciales, Spears estaba luchando en esos años contra su adicción.
En ellos se detalla, además, el desarrollo de los acontecimientos del día en que Spears perdió la custodia de sus hijos: "El 1 de octubre de 2007, a Britney Spears le quitaron le quitaron la custodia legal de Jayden y Sean. Pasó la noche en un aparcamiento, después llamó a Sam [su mánager] y le dijo que él era una de las pocas personas en las que confiaba".
Lutfi mantiene que solo accedió a administrar la carrera de Spears si dejaba de drogarse y si le concedía el 15% de sus ganancias durante el tiempo en que fuera su mánager, según The Hollywood Reporter. Ahora, él asegura que ella no cumplió con su parte del trato.
Ahora la cantante recompuso su vida, y comparte la custodia de sus hijos con su expareja, Kevin Ferdeline.