Bogotá.- Unas 400 personas, entre socorristas, bomberos, soldados y policías, entre otros, reanudaron la búsqueda de desaparecidos en la riada que asoló este lunes una aldea del noroeste de Colombia, con el resultado preliminar de 62 personas muertas, según un informe actualizado.
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) confirmó que las tareas se reanudaron entre una constante lluvia que dificulta la búsqueda.
En la misión participan la Cruz Roja colombiana, la Defensa Civil, Bomberos, Policía, Fuerza Aérea, Ejército, Ministerio de Salud y Medicina Legal en coordinación con el Consejo Departamental de Gestión el Riesgo de Desastres del departamento de Antioquia (Dapard), donde se encuentra el corregimiento Las Margaritas, de 500 habitantes, que forma parte del municipio de Salgar.
Según el último reporte, entregado por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, en el programa gubernamental Agenda Colombia, hasta el momento la cifra de fallecidos se sitúa en 62 personas y los heridos ascienden a 37. Se desconoce por ahora el número de desaparecidos.
Los cadáveres de 59 de los fallecidos han sido trasladados a Medellín, la capital del departamento de Antioquia, para proceder a su identificación y posterior entrega a sus familiares.
El gobernador del departamento, Sergio Fajardo, explicó en varias entrevistas radiofónicas que la dificultad de las labores es "encontrar a las personas desaparecidas" que fueron arrastradas por el fuerte caudal que generó la quebrada Liboriana al represarse y luego desbordarse.
Fajardo dijo que "hay alerta en todos los municipios para poder estar atentos si pasa algún cadáver" ya que en las primeras horas de búsqueda se han encontrado cuerpos "muy lejos de Salgar" arrastrados por la corriente del río.
Además, sostuvo que por el momento no es necesaria ayuda humanitaria porque las autoridades regionales tienen la capacidad para dar la primera respuesta y también porque ahora la tarea principal es encontrar a los desaparecidos.
Salgar, un pueblo de agricultores de unos 18.000 habitantes, ha sido declarado "zona de calamidad pública" después del desastre que generó el desbordamiento de la quebrada Liboriana, que se llevó por delante en Las Margaritas casas con personas dentro, vehículos, árboles, cultivos y todo lo que había a su paso. EFE