Pasha Lee, el presentador ucraniano de TV que murió protegiendo a civiles en medio de un bombardeo ruso
Horas después del inicio de la invasión rusa a gran escala en Ucrania, el pasado 24 de febrero, el reconocido presentador de televisión, Pasha Lee, abandonó su trabajo y se sumó como voluntario en el ejército para defender a su país.
En un par de días, su vida había cambiado totalmente. Su rutina diaria, constituida de sesiones de ejercicio en diversos gimnasios, visitas a hoteles lujosos y viajes a ubicaciones remotas reflejadas en su cuenta de Instagram fueron sustituidas por el frenesí perpetuo del trabajo militar.
Lee, de 33 años, no había vivido totalmente abstraído de la guerra. En el 2020 cubrió extensivamente el conflicto suscitado por la ocupación rusa de las regiones separatistas de Donestk y Lungansk.
La decisión constituía un anormal paso en su carrera televisiva repleta de shows como "X-Factor", pero terminó sumiéndolo en temas referentes a la amenaza militar que Rusia representaba para Ucrania.
Su vida continuó en Irpin, ciudad ucraniana cercana a la capital, Kiev. Frecuentes actuaciones en el Teatro Koleso y una faceta de influencer lo mantenían ocupado gran parte del día.
Su voz también era ampliamente reconocida por sus papeles como intérprete de voz, en roles protagónicos dentro de películas tan grandes como el Señor de los Anillos.
Cuando el ataque en Ucrania se extendió tras el inicio de la invasión, Lee, acompañado de miles de hombres y mujeres, se enlistó como voluntario para asistir al ejército en sus operaciones de defensa.
Inmediatamente comenzó a recibir instrucciones acerca de como disparar misiles anti-tanques, las técnicas básicas del combate con cuchillos, primeros auxilios y los métodos de escape de instalaciones bajo bombardeos.
Sus publicaciones en Instagram habían abandonado el tono colorido que solían tener, y ahora se reducían a imágenes de la bandera ucraniana con mensajes de unidad, junto a una foto suya con el uniforme militar, esbozando una expresión seria.
El 4 de marzo comenzó el bombardeo a la ciudad de Irpin, en donde Lee vivía. En medio de una ciudad en ruinas, habitantes desesperados y aterrados por los estruendos de los proyectiles corrían para cruzar un puente que llevaba hacía el camino a Kiev, la capital, considerada como un lugar mucho más seguro en ese entonces.
El puente había sido destruido por el ejército ucraniano para evitar la entrada de tanques rusos a la ciudad, pero esto no detuvo a los ciudadanos de intentar cruzar entre los escombros.
Pasha Lee cumplía con su rol militar, protegiéndolos del fuego enemigo. El ejército ruso magnificó el ataque en la zona, y el presentador de televisión, que ayudaba a llevar las pertenencias de ciudadanos, no apareció de vuelta.
Una semana después, el 11 de marzo, su cadáver apareció en la zona. No tenía puesto su chaleco antibalas.
Poco después se conoció, por testimonios de testigos, que se lo había puesto a un niño que intentaba cruzar entre lo que quedaba del puente, justo antes de morir por los ataques del ejército ruso.
